Se espera que el mercado de relojes de lujo de segunda mano crezca a 35.000 millones de dólares para 2030
A principios de diciembre de 2022, Rolex anunciaba el nuevo programa Rolex Certified Pre-Owned, que ofrece la posibilidad de adquirir a través de sus distribuidores oficiales modelos de segunda mano, con certificado de autenticidad y garantizados por la propia marca. Sin embargo, Omega opta por todo lo contrario.
Los relojes de segunda mano que entran en el nuevo programa de Rolex cumplen con todos los requisitos de calidad que caracterizan los productos Rolex y, al mismo tiempo, gozan de una garantía internacional de dos años desde el momento de su reventa en la red de la marca.
Tal y como apunta Chrono24 para el medio Bloomberg, esta decisión por parte de Rolex impulsará las ventas a medida que legitima el mercado de segunda mano, despertando el deseo en consumidor a tratar de conseguir su primer reloj. Además, para Bob’s Watches, compañía especializada en la venta de Rolex de segunda mano, supone esperar unos ingresos de más de 120 millones de dólares este año; mientras que para Chrono24, teniendo en cuenta que hay alrededor de 30 millones de relojes Rolex de segunda mano en circulación, la marca representa el 40% de las transacciones de ventas en esta compañía.
Una decisión por parte de Rolex que reconoce la importancia del mercado de relojes de segunda mano, que tiene un valor de 20 mil millones de dólares y se espera que crezca, según de Deloitte, a 35 mil millones de dólares para 2023. Por otro lado, según el informe Farfetch Conscious Luxury 2022, pestaña «Interacción con la segunda mano», el 20 % de los encuestados dicen que han comprado un artículo de moda de segunda mano en el último año, las visualizaciones de artículos de segunda mano aumentaron un 150 % interanual, alcanzando su punto máximo en el cuarto trimestre de 2021 en el +170% interanual y el interés en los productos de segunda mano de marcas de lujo como Rolex aumentó. Para Farfetch, estos datos analizan que la demanda de lujo de segunda mano está creciendo, atrayendo cada vez más a clientes de alto valor que buscan un elemento de rareza, a menudo de marcas icónicas. Se espera que el gasto en segunda mano siga aumentando.
Sin embargo, en una entrevista que el presidente ejecutivo de Swatch Group, Nick Hayek, concedió a Bloomberg, afirma que «no veo la necesidad de regular un mercado de 20.000 millones de dólares de relojes de lujo de segunda mano«. Una estrategia que apuesta por lo contrario a Rolex. «¿Por qué deberíamos involucrarnos en el mercado de relojes de segunda mano?. Las personas que quieren comprar relojes usados, pueden comprarlos como compran muchas otras cosas. No nos necesitan«, añade Nick Hayek.