Parece entonces que las predicciones se confirman y que, tras un rápido crecimiento en general, todo vuelve a su sitio
El aumento del precio del oro y su inestabilidad actual, así como la actual caída del precio de los diamantes creados en laboratorio se transforman en cuestiones clave para la industria de la joyería tal y como se reflejó en el panel de discusión “Vista de 360 grados de 2024: perspectivas del mercado industrial, conocimientos de expertos y oportunidades comerciales” celebrado el pasado 15 de abril en la American Gem Society en Austin, Texas.
El COVID fue el punto de partida de este panel de discusión en el que profesionales, como Chris Casey, socio gerente de Tenoris, afirman que, después de dispararse las ventas de joyería durante la pandemia, estas ya han vuelto a la normalidad. «El boom del COVID terminó en abril de 2022. Es increíble lo similar que es el primer trimestre de 2024 al primer trimestre del año pasado. Hemos llegado al final de la agitación del COVID y hemos llegado a un punto de estancamiento en la industria”, afirma Chris Casey.
Estas conclusiones confirman que la industria ya está lejos de continuar siendo una montaña rusa, aquella que experimentamos durante la época de pandemia, aunque, como sabemos, todavía se enfrenta a desafíos tales como el precio del oro. Una situación que algunos ven como una oportunidad y otros como una difícil situación a la que hacer frente pero, lo cierto es que el consumidor no es tan consciente de cuanto vale el oro, de si ha subido o no, por lo que todo vuelve a estar encima de nuestra mesa. En un consumidor cada vez más consciente y educado, a la hora de comprar una joya, entiende que parte del valor depende de la calidad y, esa calidad, de los elementos que la componen.
Diamantes naturales y diamantes creados en laboratorio
Otro factor es la caída de los precios en los diamantes creados en laboratorio. «Nuestra opinión es que hay una burbuja que va a estallar. Desde marzo de 2022 hasta marzo de 2024, [los diamantes cultivados en laboratorio] fueron una gran oferta para los minoristas. Siguieron obteniendo márgenes [más altos]. Pero los costos siguieron bajando y, como resultado, el precio de venta promedio está bajando cada vez más. El resultado de esto es que sus ganancias brutas en dólares han disminuido un 27% en una pieza de joyería increíblemente importante en dos años”, afirma Casey.
“No hay nada que valide lo que realmente está sucediendo. Las ventas de diamantes naturales sueltos disminuyeron un 6,3 % en unidades durante el primer trimestre y un 10 % en el primer trimestre. Los diamantes naturales podrían tener precios más altos, que ya no funcionan para los cultivados en laboratorio”, añade.
“El precio minorista de los anillos de compromiso de entre 5.000 y 7.500 dólares ha sido abandonado. Ya no existe un anillo creado en laboratorio que tenga el tamaño correcto, por lo que estás vendiendo este gran anillo de 7 qt. cultivado en laboratorio para estar en ese rango de precios. Así que los [diamantes naturales tienen] la oportunidad de rellenar el retiro en diferentes puntos de precio minorista. De 5.000 a 7.500 dólares está vacío ahora, y de 2.500 a 5.000 dólares se están volviendo así”, concluye.
Por su parte, Assogemme publicó que 2023 ha visto una evolución interesante en el mercado de los diamantes, con una notable divergencia en los precios entre los diamantes sintéticos y naturales. Los diamantes naturales han experimentado una disminución de los precios debido a la normalización tras la euforia pospandémica que había caracterizado al mercado ya durante 2021, con un aumento en la venta minorista de joyas de diamantes del 29% (fuente Bain & Company) dado por el deseo de los consumidores de expresarse y sellar momentos importantes con preciosos regalos. Este aumento superó con creces los valores normales del mercado, que siempre han mantenido un aumento gradual de los diamantes naturales a largo plazo.
También en 2023, los diamantes naturales han animado el creciente mercado de segunda mano, una de las tendencias más relevantes de la década 2020-2030. De hecho, a lo largo del año, el mundo de las casas de subastas confirmó el constante interés de los coleccionistas por los diamantes naturales con características y colores raros, como el rosa fantasía y el azul fantasía, que han registrado ventas notables: el Rosa Eterno, vendido por 34,8 millones de dólares en la oficina de Sotheby’s en Nueva York y el Blue Royal se vendió en Christie’s en Ginebra en noviembre pasado por 43,8 millones de dólares.
A su vez, los diamantes creados en laboratorio experimentaron una importante caída de precio en 2023 debido a la producción creciente e ilimitada resultante de las recientes innovaciones tecnológicas industriales. La sustancial caída de los precios de los diamantes sintéticos ha puesto de manifiesto que no mantienen su valor ni a corto ni a largo plazo, a diferencia de los diamantes naturales. Además, la disparidad en los precios de los diamantes sintéticos, a menudo comparados engañosamente con los diamantes naturales y promocionados como éticos, son prácticas que pueden llevar a los consumidores a creer que están obteniendo una ganga. Sin embargo, los diamantes sintéticos pueden ser hasta un 98% menos valiosos que los diamantes naturales, según la Lista de precios de Rapaport. Para salvaguardar la industria y, en consecuencia, el mercado, es fundamental que los consumidores sean conscientes e informados en su elección.
Esto supone que, en este caso, el boom también ha llegado a su fin y la industria de los diamantes encontrará una estabilidad entre unas piedras y otras.
Un futuro más estable
Parece entonces que las predicciones se confirman. Cuando inauguramos el 2024, lo hicimos adelantando que el escenario que venía reflejaba incertidumbre, sobre todo en un momento en el que, si miramos fuera, China ha crecido durante el 2023 más despacio de lo esperado y, sin embargo, India es un nuevo país potencial para este sector; de hecho, los líderes de la industria anticipan más vientos en contra y no están seguros de las perspectivas para el próximo año, teniendo en cuenta a los desafíos presentes desde el inicio de año. Pero, lo cierto es que los inversores esperaban que 2024 comenzara con cierta debilidad después de un gran y rápido crecimiento, un gesto natural que colocará todo en su sitio. Y, de momento, así está ocurriendo.
