«Cuando lancé la marca en 1996, tenía segura mi misión: quería representar la autenticidad, la diversidad y la innovación en el mundo de la alta joyería»
Roberto Coin destaca en el mundo de la alta joyería por una trayectoria marcada por la sabiduría de enlazar la tradición joyera con la modernidad que ofrecen hoy en día herramientas como la maquinaria. Hablamos con su fundador, Roberto Coin, para descubrir como ha sido el camino de esta marca, como encaja en el mercado español y qué planes de futuro envuelven a la marca.
¿Cómo resumiría la trayectoria de Roberto Coin desde sus inicios hasta día de hoy?
Cuando lancé la marca en 1996, tenía segura mi misión: quería representar la autenticidad, la diversidad y la innovación en el mundo de la alta joyería. Ocurrió en un período de máxima exposición para las marcas, con logos por todas partes y, en este ambiente, elegí firmar mis piezas con un rubí invisible engastado en el lado interno de cada joya.
Seguí manteniéndome al margen de las reglas de la joyería, utilizando la mejor alta tecnología mezclada con las antiguas tradiciones italianas, un equilibrio cotidiano único entre artesanos y máquinas, capaz de dar forma a colecciones inesperadas que marcaron la historia estilística de la marca.
¿Por qué decide fundar Roberto Coin y dedicarse al universo joyero?
Antes de esta aventura en el campo de la joyería, trabajaba en el negocio de la hostelería. Era dueño de un hotel en Guernsey, el hotel The Duke of Richmond. Mi carrera fue exitosa, pero mi amor por la creatividad y el estilo italiano siempre estuvo vivo. Esta pasión me hizo cambiar el horizonte de la vida, volver a Italia y entrar en el mundo de las joyas. Me interesaba todo lo relacionado con la moda y las representaciones estéticas, pero las joyas eran la materialización real de los sueños en mi mente.
Combináis tradición y artesanía con actualidad e ideas que rompen las reglas, ¿cuál es la fórmula para encontrar el equilibrio perfecto y destacar en el mercado?
Como mencionaba antes, el equilibrio único que trabajamos cada día, mezclando las tradiciones más antiguas junto con la innovación tecnológica. Existe un diálogo abierto y continuo entre artesanos y máquinas, personas mayores con manos sabias y jóvenes con nuevas visiones. Somos unos enamorados de la creatividad y queremos crear lo inesperado para sorprender a nuestros clientes.
Más allá de esto, también se presta atención constante a la demanda de los mercados. Estamos presentes en 60 países y cada uno reclama estilos diferentes, este es el arte de ser diferente.
Y a la hora de crear diseños creativos y diferentes, ¿cuál es la inspiración?
La inspiración viene de todas partes. Mis principales fuentes son la naturaleza, el arte, la arquitectura y las diferentes culturas que me permitieron crear colecciones como Animalier, Art Decó, Princess Flower y Love in Verona. Italia es un museo al aire libre; la belleza está en todas partes y Venecia por sí sola ya es una inspiración infinita para mí.
El sector del lujo está viviendo una nueva era, ¿cuál es su opinión sobre esto?
Este es un gran momento para el negocio, pero no durará para siempre. Un grado natural llegará pronto y la compleja situación geopolítica internacional requiere que estemos preparados para cada cambio y nuevos desafíos.
¿Cómo cree que debería actuar el sector ante este nuevo cambio de mercado?
El complejo cambio que llegará es un desafío para nosotros, pero nos encantan los desafíos. La regla número uno es cuidar a la clientela existente, brindándole el mejor servicio y eficiencia cada día.
Habéis crecido internacionalmente poco a poco, ¿cómo ha sido este proceso y cómo os ha ayudado a trabajar en el futuro de la marca?
Dí mi vida para construir esta marca. No se trata sólo de diseño, calidad o servicio sino también de la dedicación total que dí como ser humano. La marca me representa a mí y a mi credibilidad hoy.
¿Qué supone el mercado español para Roberto Coin?
Adoro España y además mi esposa es española. Estamos trabajando paso a paso en el país y tenemos objetivos importantes que alcanzar.
¿Cómo consigue Roberto Coin atraer al consumidor español? Y ¿en qué se diferencia el consumidor español de otros que pueda tener Roberto Coin?
El sabor español es muy similar al italiano. Estamos trabajando con colecciones como Love in Verona y Art Decó o Domino que son perfectas, no sólo por su diseño sino también por ese toque de elegancia tan particular que se aprecia mucho en España.
¿Planes de futuro que nos podáis adelantar?
¡Estad atentos porque nos encantaría abrir una boutique propia en España!