Los expertos del sector en Bélgica esperan que las sanciones se apliquen gradualmente, limitando así las perturbaciones del mercado
La industria de los diamantes se prepara para nuevas sanciones a Rusia y, mientras las capitales europeas se preparan para aplicar las tan esperadas sanciones a las exportaciones rusas de diamantes, los comerciantes belgas se anticipan a un nuevo escrutinio de su industria.
A mediados de año, los diamantes rusos conseguían escapar, en parte, a las sanciones occidentales establecidas por el conflicto generado con Ucrania. En ese momento, los países del G7 estaban inmersos en dar con nuevas vías para cortar los ingresos que recibe Rusia por parte de esta industria, prometiendo nuevas sanciones. Ahora, el G7 planea aumentar ese plan de sanciones.
Entre todo esto, en el famoso distrito de los diamantes de Amberes, que gestiona aproximadamente el 86% de los diamantes en bruto del mundo, los «laboratorios» de pulido están recurriendo a la tecnología blockchain para demostrar que sus piedras preciosas proceden de minas legítimas de África, Australia o Canadá, y no de Rusia. Cabe destacar además que, dado que las piedras rusas representaban alrededor de un tercio del mercado mundial antes de la invasión de Ucrania por Moscú en 2022, la decisión del G7 de prohibir su comercio podría tener repercusiones. De hecho, el gobierno belga afirmó el año pasado que un embargo sobre los diamantes rusos «no tendría sentido económico«, ya que «penalizaría a un estado miembro en particular«, mientras que Rusia aún podría vender sus diamantes en otros lugares. Por ello, los expertos del sector en Bélgica esperan que las sanciones se apliquen gradualmente, limitando así las perturbaciones del mercado.
Al mismo tiempo, los principales comerciantes y marcas de joyería también han empezado a adoptar tecnología avanzada de seguimiento para comprobar y certificar la procedencia de sus diamantes, en un momento en el que además esta industria se encuentra inmersa en su una labor ética y transparente.
Nuevas sanciones
La Unión Europea está elaborando prohibiciones sobre los diamantes rusos como parte de su duodécimo paquete de sanciones para estrechar el cerco sobre la economía de guerra de Moscú y cortar los fondos que el país está utilizando para comprar municiones y aviones no tripulados de Corea del Norte e Irán.
Una labor que continúa siendo difícil ya que resultado complicado ponerse de acuerdo sobre la mejor manera de restringir el comercio de diamantes, puesto que se trata de un producto fácil y lucrativo de contrabandear. Al mismo tiempo, Europa, especialmente Bélgica, tiene otra preocupación: incluso con las sanciones de la UE, las gemas rusas podrían seguir llegando a competidores en lugares como Dubái e India.
Por lo tanto, y a medida que avanzaban las conversaciones sobre las sanciones de la UE, las potencias del G7 intervinieron y las principales democracias industrializadas del mundo acordaron una prohibición mundial. La Comisión Europea ha adoptado una propuesta que pasará a los Estados miembros para su aprobación, prevista en los próximos días si los 27 Estados miembros se muestran unánimes.
Según una copia vista por AFP, se prohibirá el comercio de diamantes originarios, en tránsito o exportados de Rusia, así como los diamantes rusos tallados y pulidos en países terceros. A partir del 1 de enero de 2024, la prohibición se aplicaría a los «diamantes naturales y sintéticos no industriales, así como a las joyas de diamantes». Y la prohibición de importar diamantes rusos tallados o pulidos en otros países se introduciría progresivamente entre marzo y septiembre del año que viene.
«Esta introducción progresiva… tiene en cuenta la necesidad de desplegar un mecanismo de trazabilidad adecuado que permita medidas de aplicación efectivas y minimice las perturbaciones para los agentes del mercado«, se indicó en este borrador.
Rusia produce hoy cerca de 35 millones de quilates de diamantes. Los diamantes habrían aportado 4.500 millones de dólares (4.100 millones de euros) a Rusia en 2021, según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Desde febrero de 2022, la UE ha prohibido más de 43.900 millones de euros en bienes exportados a Rusia y 91.200 millones en importados, según las últimas cifras facilitadas por la Comisión Europea. Esto significa que el 49% de las exportaciones y el 58% de las importaciones están ahora sujetas a algún tipo de sanción, en comparación con los niveles anteriores a la guerra, en 2021.
Mientras tanto, las dudas sobre si las sanciones prohibirán definitivamente el comercio de los diamantes rusos o si estas sanciones afectarán a la industria en general sigue en el aire.