La compañía cierra el año con «otro año récord a pesar de un entorno perturbado»
El conglomerado de lujo LVMH anunció el pasado jueves su ejercicio del año, en el que obtuvo unos beneficios netos de 15.174 millones de euros en 2023, lo que equivale a un aumento del 7,7 % en comparación con 2022. De esta forma, las ventas del grupos crecen, pero a un ritmo más lento del de 2022, confirmando la tendencia predecida en cuanto a un año que comienza con incertidumbre también en el segmento del lujo aunque, por otro lado, también se trata de un gesto natural.
LVMH facturó 86 153 millones de euros en 2023, un 8,8 % más, con mejoras en prácticamente todas sus divisiones. En concreto, la facturación de la categoría de joyas y relojería registró un crecimiento orgánico de los ingresos del 7 % en 2023 y el beneficio de las operaciones recurrentes aumentó un 7 %. De hecho, desde el grupo, afirman un «fuerte crecimiento en la joyería y un poderoso impulso creativo para todas las casas de relojes y joyas, en particular Tiffany, Bulgari y TAG Heuer.»
En cuanto a la procedencia geográfica de los ingresos, Francia generó el 8 %; el resto de Europa, un 17 %; Estados Unidos, el 25 %, Japón, el 7 %; el resto de Asia, el 31 %; y los demás territorios, un 12 %. Ya solo en el cuarto trimestre, los ingresos fueron de 23 948 millones de euros, un 5,5 % más.
El resultado neto de LVMH fue de 15.174 millones de euros, por debajo de la previsión de llegar a los 15.720 millones de euros. Una posibilidad que el grupo ya había advertido en octubre por los efectos negativos de las divisas, que probablemente afectarían a los márgenes del grupo. Aún así, LVMH se ha mostrado «confiada» en continuar con su tendencia de crecimiento en 2024 a pesar del «incierto entorno económico y geopolítico», aunque mantendrá su estrategia de refuerzo de marca, especialmente, dada su asociación con los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París.