«España sigue siendo un mercado muy importante y estratégico para Longines. Nuestro objetivo es consolidar aún más nuestra posición, fomentando conexiones más profundas con nuestra clientela española»
Del 28 de septiembre al 1 de octubre, Longines se convirtió, una vez más, en Patrocinador Principal, Cronometrador y Reloj Oficial del evento deportivo internacional más antiguo de España, el Longines FEI Jumping Nations Cup™. Barcelona acogió la 111º edición y, con motivo de ello, entrevistamos a Matthias Breschan, CEO de Longines.
Para que el sector pueda conocerle mejor, ¿nos podría contar un poco sobre su andadura en la industria relojera?
Mi trayectoria profesional en el mundo relojero comenzó en 1996, cuando me uní al Grupo Swatch. Siempre me ha fascinado el universo relojero, ya que es uno de los únicos sectores que se basa en sus tradiciones para ir más allá e innovar. En relojería, perpetuar una tradición es lo que nos hace estar vivos. Esto es una realidad en el caso de Longines: una marca con una profunda dimensión histórica que lanza productos técnicamente muy eficaces.
Llegó a Longines en 2020, un año complicado, ¿con qué objetivo y cómo ha ido evolucionando la marca desde entonces?
Durante los últimos tres años años, la pandemia provocada por la COVID-19 presentó, por supuesto, desafíos para toda la industria y Longines no fue la excepción. Sin embargo, nuestra diversa gama de colecciones y nuestra sólida imagen de marca nos permitió adaptarnos rápidamente. Desde entonces, hemos notado crecimiento e innovación en varios aspectos de nuestro negocio, desde el desarrollo de productos hasta la participación del cliente y las ventas.
Longines es una firma relojera con un legado muy vivo ¿cuáles son los nuevos objetivos de la marca y cómo se adaptará a una industria que está cambiando tan rápido?
Una de nuestras fortalezas clave es el amplio atractivo de nuestra colección, que atiende a una clientela diversa que abarca tanto a mujeres como a hombres por igual. Esta inclusión nos permite capturar una amplia participación de mercado y establecer una conexión profunda con nuestros clientes.
Además, Longines ha logrado equilibrar su oferta entre relojes deportivos y clásicos. Esta versatilidad nos permite atender a personas con diferentes gustos y preferencias. Al mismo tiempo, nuestra marca cuenta con una herencia incomparable en la industria relojera suiza; con un legado que abarca más de 190 años, Longines ocupa una posición única, llena de historia y tradición. Esta herencia no sólo solidifica nuestra reputación de calidad y artesanía, sino que también nos posiciona a la vanguardia del creciente interés por los relojes antiguos.
Estos factores en conjunto nos establecen como una marca que ofrece un valor excepcional a nuestros clientes, lo que convierte a Longines en una opción distintiva en el mundo de la relojería.
Y hablando de estos cambios y del futuro, ¿qué dirección quiere tomar la marca y a qué futuro aspira?
Creo firmemente en la combinación de distribución online y offline. Los canales digitales y el e-commerce se han convertido, además de las tiendas físicas, en algo esencial para llegar a los consumidores hoy en día, ofreciendo toda la comodidad y confianza de las compras online y acercando a los consumidores a las marcas como nunca antes. Estas herramientas seguirán formando parte de la estrategia de Longines.
¿Cómo es la situación de Longines en el mercado español y qué objetivos tenéis?
España sigue siendo un mercado muy importante y estratégico para Longines. Nuestro objetivo es consolidar aún más nuestra posición, fomentando conexiones más profundas con nuestra clientela española, mientras exploramos oportunidades de crecimiento en este dinámico mercado. En términos más generales, la marca está obteniendo excelentes resultados en Europa gracias a nuestros productos, que combinan un fuerte vínculo con nuestra herencia y con nuevas tecnologías e innovaciones.
También contáis con nuevos embajadores a nivel global, ¿qué despierta en el consumidor final contar con una cara conocida como imagen de marca?
Seleccionar celebridades con quienes colaborar implica considerar valores que se alineen con la marca. En el caso de los Longines Ambassadors, la elegancia es el denominador común; por ello, nuestros embajadores aportan una poderosa dimensión a la marca Longines que resuena con nuestros consumidores a nivel personal, proporcionándoles una conexión tangible con nuestra marca y sus valores.
Tomemos, por ejemplo, a Jennifer Lawrence. Ella es mucho más que una estrella de cine. Puede aportar realidad y autenticidad a cada personaje que interpreta, reflejando su propio carisma, su aguda inteligencia y su humildad. Fuera de la pantalla, esto se traduce en una elegancia que es a la vez natural e identificable. Ella es una inspiración para mujeres de todas las edades y orígenes. Longines se enorgullece de tenerla como parte de su familia.
¿Qué nueva colección destacaría de esta temporada? ¿Y qué nuevos planes nos puede desvelar?
En septiembre, estuvimos encantados de presentar al mundo nuestra nueva Mini DolceVita. Este modelo es la expresión perfecta de elegancia contemporánea y lujo tranquilo: con su perfil discreto, estilo clásico y variaciones estéticas que son al mismo tiempo oportunas y atemporales, esta nueva colección está en realidad inspirada en una leyenda de Longines creada en 1927 y, por supuesto, la línea DolceVita original de 1997.
Además de la Mini DolceVita, ¡tenemos muchas sorpresas reservadas hasta fin de año! Si bien no puedo revelar ningún detalle específico en este momento, puedo asegurarles que estos nuevos lanzamientos seguirán manteniendo los valores de elegancia, tradición y rendimiento de la marca.