Sea como sea, las joyas de perlas se renuevan una y otra vez para alejarse de lo predecible y sorprendernos. Un must al que nadie quiere renunciar
Las perlas siempre han sido un referente en el universo de la joyería, la pieza que además nunca deja de reinventarse. Series de Netflix como Élite o The Crown y su quinta temporada inspirada en Lady Di o la colaboración de Jane Bardot con Compte para la 080 Barcelona Fashion; el deseo de piezas atemporales, el auge de lo vintage y como ciertas joyas pasan de generación en generación; nuevos códigos de estilo que rompen con reglas preestablecidas, el genderless, como esta joya es de las pocas que se adapta a cualquier contexto y que las perlas siempre han tenido ese “algo”. Todo esto, y quizás mucho más, han hecho de las joyas con perlas algo más que una tendencia, convirtiéndolas en un esencial y en el deseo de todas las generaciones. ¿Quién no tiene una joya con perlas en su joyero?.
Desde joyas emblemáticas inspiradas en épocas pasadas, como los pendientes de botón o los largos collares de perlas que hemos sido testigos de su regreso en esta temporada, hasta una nueva reinterpretación de estas piezas. Las perlas ya no entienden de reglas y su universo es mucho más amplio. Según un estudio de Zion Market Research, la industria de la joyería de perlas es el segmento del mercado más grande del sector que gira en torno al diseño, la producción o el abastecimiento y se espera que el valor del tamaño de este mercado aumente su nivel de alrededor de 10.500 millones de dólares (2022) a alrededor de 25 mil millones de dólares para 2030. Y es que, el ritmo significativo de la creciente popularidad de las perlas y el aumento de la demanda de este tipo de joyas, hacen que el mercado mundial de joyas de perlas se encuentre en constante crecimiento.
Entre todas las tendencias de la temporada, la estética neoburguesa es una de las más vistas en el Street Style, con una dosis de clasicismo envuelta en la modernidad y personalidad de hoy. Los collares también se han renovado, inspirándose en tendencias pasadas; ahora, los collares largos y los collares con varias vueltas están por todas partes; sil olvidarnos de las perlas convertidas en choker. Las joyas fifty fifty, esas que combinan perlas con otros materiales, vuelven a ser vistas como la joya que más luciremos en esta época estival y, por supuesto, las perlas en su formato maxi que tanto se dejaron ver en pasarelas. En cuanto a manual de uso, también juegan con el layering, una declaración de intenciones para mezclar estilos y materiales.
Sea como sea, las joyas de perlas se renuevan una y otra vez para alejarse de lo predecible y sorprendernos. Un must al que nadie quiere renunciar.
