Una gala en la que la joyería se convirtió en uno de los elementos protagonistas de los estilismos de las invitadas
Nunca tantas tendencias habían sido protagonistas en una alfombra roja. En la noche de ayer la MET Gala celebró una nueva edición, quizás una de las más esperadas. El hype generado en los últimos meses puso las expectativas muy altas y, en materia joyas, ha sido mucho mejor de lo esperado.
Esta edición de la MET Gala, celebrada en el Metropolitan Museum of Art de Nueva York, era un homenaje a uno de los diseñadores que más amaban la calidad y la ostentosidad en todas sus facetas, Karl Lagerfeld, quizás por ello la joyería se convirtió en uno de los elementos protagonistas de los estilismos de las invitadas, confirmando con ello diferentes tendencias de la temporada que veremos una y otra vez y que, además, rompen con reglas y códigos preestablecidos.
Pendientes XL
Sin duda, la joya más vista en la red carpet. Desde los de Cardi B, pasando por los de Rihanna o los pendientes irregulares de Emily Ratajkowski. Todas las tendencias en joyería han desfilado en esta alfombra roja, convirtiéndose en absoluta fuente de inspiración.
El dorado
Los pendientes dorados en formato maxi y con una estética vintage se han convertido en el objeto deseo por excelencia de la temporada; una joya que luce tanto en el día a día como en una cita nocturna y ahora también en una alfombra roja. Así lo confirman Julia Garner, que ha elegido unos pendientes dorados formados por varios aros, y Michaela Coel, con unos pendientes geométricos y muy maxi.
Perlas en pendientes y (sobre todo) gargantillas
Como icono para Karl Lagerfeld y recurso que el modisto explotó durante sus años en Chanel, los pendientes de perlas no han faltado en la MET Gala; aunque, sin duda, lo más llamativo han sido los collares de varias vueltas, la tendencia renovada que llegó por sorpresa y ya ha conquistado el street style, el mundo nupcial y la red carpet. Un gesto recuperado de otra década que se alía con el lifestyle del momento.
Choker y gargantillas
No hay alfombra roja sin gargantillas o collares típicos de un momento como éste; el mejor ejemplo es el de Dua Lipa, que ha lucido un espectacular collar de Tiffany & Co o Kate Moss con el clásico y sofisticado choker. Los eslabones más brillantes y llamativos también han formado parte de esta gala, como la gargantilla de varias vueltas que lució Irina Shayk o la versión clásica de Priyanka Chopra. El look de Nicola y Brooklyn Beckham tampoco ha pasado desapercibido, ya que los dos han optado por una combinación de collares que marca un exceso en equilibrio.