La cadena calabrote y el collar trenzado vuelven a ser imprescindibles
Podíamos hablar de tendencia, pero más bien es un regreso al que miramos con otros ojos. Dos collares ya conocidos por el sector joyero vuelven a ser capricho de los que más saben de moda, colocándolos como los nuevos objeto deseo de la temporada y, sobre todo, del próximo año. Sí, podemos adelantar que estas joyas han llegado para quedarse por un tiempo.
Las décadas pasadas se han convertido en inspiración a la hora de crear nuevas tendencias que al mismo tiempo no alteren el valor más preciado de la joyería, la atemporalidad. Por ello, no es de extrañar que muchas de las tendencias de la temporada tengan una connotación clásica o cuenten con unos códigos estéticos que, en realidad, ya conocemos.
Así es que, hablamos de dos collares que son dos iconos en el universo joyero y que se instalan de nuevo en nuestro joyero. Por un lado, los collares trenzados, ya sean planos o en forma de cordón, que nos recuerdan a la década de 1950 y que se convierten en un nuevo must. ¿Quién lo afirma? Hailey Bieber, experta en crear nuevas tendencias en joyería.
El otro collar también es un viejo conocido y con una estética sofisticada que reconocemos al instante. Hablamos de la cadena calabrote, la misma que hizo un regreso convincente en la apertura del desfile de Gucci SS 2024, que se celebró el pasado 22 de septiembre en Milán. Desde entonces, esta joya vuelve a ser protagonista en la escena joyera.
No es de extrañar que Gucci nos haya querido recordar este icono puesto que la cadena calabrote, reconocible porque también recuerda a unos granos de café, es originaria de Italia. Una joya que se consideraba hasta hoy anticuada y que, en realidad, es símbolo de la joyería y un nuevo esencial de cualquier joyero. En formato maxi, como en el desfile de Gucci, o en formato minimal, esta cadena será una de las más vistas durante el próximo año.