Esta temporada, los clásicos reinventados se convierten en las joyas por excelencia que no pueden faltar en ningún joyero y que, además, protagonizarán los looks más delicados y femeninos. Un regreso que tan solo demuestra cómo una buena joya de las de siempre es suficiente para complementar un look y hacerlo único. Este Otoño-Invierno, Luxenter rinde homenaje precisamente a su esencia más pura realzando algunos de sus diseños más icónicos, actualizados con una mirada contemporánea.
Hay joyas a las que siempre recurriremos, esas que perduran en el tiempo pero que no por ello tienen que renunciar a un diseño con personalidad. Luxenter, reconocida por su dominio de las gemas naturales, el color y el volumen escultural, recupera sus piezas legendarias y las reinterpreta con nuevas proporciones, engastes más sofisticados y combinaciones cromáticas llenas de personalidad. El resultado son joyas que siempre querremos lucir.
El regreso de los iconos
En la lista de las joyas más deseadas de Luxenter que resurgen con una nueva estética encontramos las emblemáticas gargantillas de bolas minerales, que regresan con más fuerza que nunca. Tonos empolvados de morganita, aguamarina o berilo conviven con intensos naranjas, rojos y fucsias que llenan de energía cada look. El diseño se complementa con entrepiezas bañadas en oro y detalles de circonitas que elevan la joya y la convierten en un icono atemporal.
También están los pendientes voluminosos, auténticas piezas statement de Luxenter, que se presentan esta vez con un pavé de gemas en tonos amatista, realzados por el brillo cálido del baño en oro. Su silueta redondeada y envolvente es un guiño al glamour de la firma, ahora reinterpretado con una elegancia actual.
Las pulseras triples de piedras naturales, otro de los sellos inconfundibles de la marca, se reinventan en versiones más ligeras, versátiles y combinables. Desde la intensidad de la hematite hasta la delicadeza de la amatista o el frescor del azul aguamarina, cada modelo refleja el equilibrio entre fuerza y feminidad que define a Luxenter.
Y para las amantes de las piezas más sofisticadas, el icónico anillo abombado pavé vuelve renovado con una estructura orgánica repleta de circonitas en diferentes tamaños que juega con la luz y la textura, creando un efecto hipnótico y absolutamente contemporáneo.
En definitiva, una colección con la que Luxenter demuestra que la verdadera iconografía siempre es capaz de evolucionar. Rediseñar sus clásicos no es mirar al pasado, sino proyectarlos al futuro. Porque los iconos de Luxenter no solo se llevan… se recuerdan.