La apuesta por la excelencia es el principal camino a seguir
La recta final de 2024 se acerca a la meta. Después de un año en el que se habrán cumplido las expectativas de unos y tal vez no de otros, estamos a punto de llegar a diciembre.
La economía sigue creciendo, el PIB aumenta al 2,9% de tasa interanual; por lo que debemos revisar al alza las previsiones. El consumo privado es el que mueve este avance y es la clave del éxito.
Se espera una inflación debajo del 3% y que la tendencia del euríbor ablande las hipotecas. Todo esto nos dará un respiro positivo, pero nuestro sector tiene otro factor muy a tener en cuenta. El precio del oro, que es el que va a influir en nuestras cuentas de resultados. Hay quien dice que pronto lo veremos a 100 euros el gramo. ¿Para cuándo?
Pero nada nos ha de influir para bajar la guardia. La joyería es milenaria y seguirá siendo un referente por muchos siglos más.
Debemos tomar todos los datos con precaución, pero sin dejar de ser optimistas. Conscientes de las dificultades del momento preparémonos para esta recta final y lograremos los objetivos previstos.
Se van consolidando todos los mercados y frentes establecidos en la venta ya sean puntos físicos o virtuales. Este sector siempre fue de confianza y muy serio; por ello el que se sitúa bien y con rectitud suele triunfar.
El comprador tiene un alto grado de planificación y grandes campos de información. Todas las herramientas disponibles empiezan a saberse manejar, ya sean ordenadores, tablets, móviles, etc. etc. La logística funciona veloz y eficaz. Las garantías de marcas serias se emplean con rectitud. Todo gira en una dirección favorable para dar confianza al consumidor. A pesar de las guerras, el turismo sigue creciendo y aumentando el consumo.
La apuesta por la excelencia y construcción de marcas sólidas es el camino a seguir. La formación profesional del sector nos está ayudando a construir más bases sólidas para la conquista del mercado, con establecimientos físicos y virtuales que nos enorgullecen…
La burocracia ha de quedar desplazada, y poner énfasis en la logística, facilitar la información y agilidad. Hay que buscar la forma de dejar el mejor sabor de boca tras realizar una compra; y ello es valido para cualquier establecimiento. De esto en la alimentación saben mucho.
Nuestro sector es una cadena llena de eslabones y han de estar todos unidos y bien soldados para que funcione correctamente y de esta manera todos obtendremos los beneficios deseados. Vamos juntos en un mismo barco y navegando en una sola dirección, con la mirada puesta en el faro que nos indica donde está el puerto.
Todos debemos buscar nuevos retos, innovar, ganar competitividad y seguir creciendo, ya sea en el mercado local como en la búsqueda de otros mercados nacionales o en el exterior. Tengamos siempre presente que el mundo es global.
Cada día tenemos más y mejor información para analizar todos los mercados internos y externos y con ello hay muchas más posibilidades de acertar tanto en el dónde, como en el cuándo, cómo … y qué producto es ideal para cada mercado.
Creemos el futuro de nuestras empresas teniendo siempre presente esta palabra: INTERNACIONALIZACIÓN.
La mejor manera de proteger una empresa es prepararse contra todo tipo de amenazas, formarse para saber prevenirlas y atacarlas e implementar tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial. A nosotros también nos afecta.
El talento es el mejor motor del cambio, tener una visión clara y un propósito sólido, y jamás tirar la “toalla”.
Si quieres que algo cambie, provoca tú mismo el cambio. Sólo así conseguirás lo que quieres.