La duda o la indecisión no nos van a llevar a ninguna parte
El sector está cogiendo la velocidad de crucero. Pero VicenzaOro marcó un ritmo tan alto en la salida, que solo los que estén entrenados y bien preparados, van a poder seguir.
Nuestro sector es como el árbol en medio de una tormenta. El viento sopla con fuerza y parece que lo hace sucumbir, pero él sigue ahí; con unas fuertes raíces que no lo dejan caer, y con la llegada de la primavera vuelve a florecer.
Al igual que ese árbol, los que seguimos en este sector tenemos una fortaleza arraigada en nuestro interior que nos impulsa a seguir la carrera aunque tengamos tropiezos o caídas en el camino.
No somos víctimas de las circunstancias que nos rodean, sino los protagonistas de todo lo que nos rodea y de algún modo nos pertenece.
Debemos tomar el control en todo momento y encontrar el propósito aunque se produzcan circunstancias adversas.
Los que ya tenemos cierta edad y experiencia hemos aprendido a transformar las emociones en combustible para seguir la marcha. Los años nos han enseñado a convertir la carga de plomo que llevamos encima en oro y a encontrar la luz en medio de cualquier túnel que nos hayamos metido.
En los reveses siempre encontramos sentido para procesar las emociones sin dejar que nos definan. En cada experiencia debemos ser capaces de buscar soluciones por muy desafiantes que sean.
Los años nos enseñaron a desarrollar habilidades escondidas en nuestro interior. Este se nutre de la fe y la creencia en nosotros mismos, y de la confianza en encontrar la salida por estrecho que sea el camino.
No importa lo grande que sea el obstáculo. Recuerda que tienes dentro de ti el motor que proporciona la energía suficiente para saltarlo. Abracémonos al desafío como una oportunidad para crecer.
Descubramos nuestro poder interior y convirtámonos en la mejor versión de nosotros mismos. El futuro está lleno de oportunidades, abrámosle las puertas y busquemos las que nos pertenecen. Tenemos una capacidad interior enorme para adaptarnos en cada momento. Aprovechémosla.
El verdadero poder está en la certeza de lo que llevamos dentro fruto del trabajo logrado en la formación adquirida.
La diferencia en nuestras vidas (tanto reales como profesionales) se va a marcar en esa fe ciega de lograr todo lo que está en nuestro interior y deseamos sacar a la luz. Es importante conectar con amor y coherencia con la energía universal para que se cumplan los deseos.
Recordemos siempre que nuestros deseos son órdenes y debemos atrevernos a sentir en grande, pensar en grande, actuar en grande, y de esta forma viviremos en grande.
Llegó la hora de poner las ideas en orden, pensar y reflexionar y, de vez en cuando hacer también un ayuno digital. Esto nos ayudará a pensar. Es necesaria una búsqueda de serenidad y conexión con el entorno.
La duda y falta de decisión no nos van a llevar a ninguna parte. Ahora o nunca.