Un sistema invisible desarrollado por Cartier que aumenta la magia del conjunto en esta nueva versión de la icónica colección
La actriz Milena Smit y la bailarina y coreógrafa, Blanca Li, embajadoras de Cartier, presentan las nuevas creaciones de joyería de la colección Panthère de Cartier. Más felina y libre que nunca, la colección se enriquece con creaciones escultóricas, algunas de ellas totalmente articuladas.
Collares, brazaletes, piezas con un potente volumen y una notable flexibilidad, capaces de desplegarse sin necesidad de bisagras. Un sistema invisible desarrollado por Cartier que aumenta la magia del conjunto en esta nueva versión de la icónica colección. Estas joyas flexibles, magnéticas y indisociables de la imagen del animal emblemático de Cartier, al que la Maison ofrece un fabuloso cara a cara, abrazan la anatomía acercándose todo lo posible al cuerpo.
Con la Panthère articulada, caracterizada por sus líneas depuradas y su diseño preciso, Cartier ha cultivado la sencillez joyera: una pulsera de oro amarillo con manchas octogonales de laca negra o de oro blanco con pavé de diamantes y engastado con manchas de ónix. La joya curvilínea se prolonga con dos esculturales cabezas de pantera enfrentadas con ojos de esmeraldas o granates tsavoritas.
Los retos del savoir-faire
La movilidad de la Panthère articulada reside en el montaje: el collar y la pulsera están compuestos por diferentes módulos atravesados por dos láminas de oro unidas a dos muelles que se encuentran en las cabezas de la pantera para mantenerlas en tensión. Un reto del savoir-faire que requiere que los joyeros de la Maison respeten la distribución de las manchas de la pantera. En las versiones con diamantes, el trabajo del engastador consiste en rodear cada piedra con pequeños granos de metal que la mantienen en su sitio y, posteriormente, realizar con maestría un recorte alrededor de las manchas de ónix para dar la impresión del pelo del animal y recrear el efecto natural del pelaje sedoso de la pantera, algo que Cartier logra gracias a su serti pelage.
Cartier y la pantera
La huella de la Panthère es un símbolo de la creación Cartier desde 1914, cuando hizo su aparición en un reloj con motivo demanchas. Tres años después, cambió el estilo abstracto por el figurativo: en 1917, Louis Cartier obsequió a Jeanne Toussaint con un neceser en el que la pantera aparece representada entre dos cipreses.
El comienzo del vínculo entre Jeanne Toussaint y la pantera. Dos años más tarde, encargó un neceser de oro y esmalte de Pekín negro en el que la pantera es una vez más la protagonista. Jeanne Toussaint hizo suyo este animal que se convertiría en su firma personal. En 1948, esta mujer visionaria, excéntrica y emancipada dio forma al felino imaginándolo en tres dimensiones. Desde entonces, la pantera recorre la historia de la Maison.
Figurativa, gráfica y salvaje, la pantera se renueva, adaptando los savoir-faire joyeros y ampliando el repertorio de su diseño y su uso. A lo largo de las colecciones, su plasticidad evoluciona. Cartier cultiva la naturaleza salvaje, sofisticada y rebelde de esta creatividad joyera a través de sus colecciones. Los volúmenes y los movimientos, la fuerza y el atractivo de la pantera, heredados de Jeanne Toussaint, siguen inspirando las joyas actuales.
