Un término que ha marcado buena parte de los meses del año que ahora acaba.
Confinamiento es la palabra del año 2020 para la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE), promovida por la Agencia EFE y la Real Academia Española. Una palabra que, sin quererlo, hemos repetido y escuchado en muchas ocasiones, más de las que querríamos, pero ¿y si a las puertas de cerrar un año complicado, miramos esto como una reflexión y un aprendizaje?
Definido como ‘aislamiento temporal y generalmente impuesto de una población, una persona o un grupo por razones de salud o de seguridad’, este término ha marcado buena parte de los meses del año que ahora acaba. La crisis sanitaria derivada de la pandemia de la COVID-19 es, sin duda, la protagonista del 2020 y las medidas implementadas para frenarla han cambiado radicalmente nuestra forma de vivir y de hablar. Y no solo para frenarla, si no que nuestro estilo de vida ha cambiado por completo, y con ello los modelos de negocio, las estrategias, las necesidades de los consumidores… como sector, hemos visto como todo cambiaba mientras nos teníamos que adaptar a los cambios a un velocidad de récord aunque, al mismo tiempo, también hemos podido «parar y pensar» para reestructurar la vida y los negocios.
La Real Academia Española, en su más reciente actualización del Diccionario de la lengua española (DLE) de noviembre del 2020, ha modificado la entrada de la voz confinamiento para ajustarla a la realidad que millones de personas en todo el mundo han vivido con motivo de la pandemia del SARS-CoV-2. Asimismo, confinamiento es la mejor alternativa frente al anglicismo lockdown para designar la reclusión forzosa de la población en sus domicilios.
La ganadora ha sido seleccionada entre una lista de doce candidatas en la que se encontraban otras palabras que han marcado el año que termina. El listado de aspirantes a palabra del 2020 propuesto por la FundéuRAE incluía además coronavirus, infodemia, resiliencia, COVID-19, teletrabajo, conspiranoia, (un) tiktok, estatuafobia, pandemia, sanitarios y vacuna.
Esta es la octava ocasión en la que la FundéuRAE elige, de entre los más de 250 términos a los que ha dedicado algunas de sus recomendaciones diarias sobre el uso del idioma, su palabra del año. La primera de ellas fue escrache, en el 2013, y la siguieron selfi (2014), refugiado (2015), populismo (2016), aporofobia (2017), microplástico (2018) y los emojis (2019).