La reconocida empresa inaugura su emblemática boutique de Marbella con un aspecto que combina tradición y modernidad y respira lujo
El lujo en el sector joyero y relojero se encuentra en fase de crecimiento y Gómez & Molina Joyeros encuentra en este momento la oportunidad perfecta para inaugurar su renovada boutique de Marbella, enclave donde esta empresa familiar fundada en 1969 se ha convertido en auténtico referente del lujo en el Sur de Europa.
Gómez y Molina, embajador privilegiado de relojes de lujo, anuncia la inauguración de su emblemática boutique de Marbella, en la Avenida de Ramón y Cajal, 15, obra del arquitecto Iñigo Amézola, fundador de la empresa de arquitectura, consultoría y diseño estratégico Principia Desing.
Cuando el arquitecto Iñigo Amézola recibió el encargo de la remodelación de una de las míticas joyerías de España, tenía claro que no iba a ser un proyecto más. La tienda Gómez y Molina Joyeros, situada en la avenida central y una de las entradas a su casco antiguo de la famosa ciudad de la Costa del Sol, planteaba no sólo un reto técnico y de diseño, sino que tenía que vincularse íntimamente con la ciudad. El resultado es un espacio que respira lujo, creado para vivir experiencias y adentrarse de una forma única en el universo joyero y relojero, un reclamo hoy en día por parte de los consumidores, que vuelven a las tiendas para desconectar y disfrutar. Sin ir más lejos, la fachada representa un joyero clásico de plata repujada realizado en piedra, acero y espuma de aluminio que destaca, sin duda, por un sistema de cierre y toldos espectaculares; una alianza entre técnicas de construcción ancestrales y última tecnología combinando, de esta forma, tradición y modernidad.
Así pues, este espacio destaca por sus 40 metros lineales de escaparate y la superficie de la tienda, de 250 metros cuadrados divida en tres plantas: el nivel a pie de calle con 120 metros cuadrados es un espacio amplio y luminoso con cinco mesas de venta y un área de espera; la primera planta alberga un espacio de exposiciones diáfano de 55 metros cuadrados; y, finalmente, el sótano aloja las oficinas de administración y un moderno taller de joyería y engaste.
En cuanto al mobiliario, diseñado en madera lacada por el estudio Principia Design e iluminado por la firma italiana IGuzzini, transmite a la perfección esa sensación de lujo y sofisticación y, al mismo tiempo, tranquilidad y libertad visual. En él destacan además las sillas de la firma Teulat, de líneas puras y muy cómodas. La mano de Fabiola Mora, diseñadora de interiores y coordinadora del proyecto, ha sido clave en la ejecución del proyecto. Cabe destacar que la primera altura de la boutique esconde un gran secreto y es que se engalana con el único jardín vertical del casco antiguo de Marbella diseñado por la empresa costasoleña Agrojardin mediante el sistema fitotextil de Terapia Urbana desarrollado y patentado por la universidad de Sevilla.
La combinación de paredes de madera presenta un lacado, en tonos negro y gris, procedente de la industria automovilista, así como materiales ultramodernos como la espuma de aluminio de procedencia canadiense que también caracterizan al interior de la joyería que, como una continuación del exterior, conforma un espacio armónico donde todo ha sido estudiado: mobiliario, iluminación, sonido envolvente, hasta una firma olfativa propia creada para este establecimiento.