El ayer es la memoria del hoy, pero el mañana, nuestro sueño actual. Ahora que llega el verano y podremos salir a navegar, conviene tener muy presente al viento.
El viento sopla a favor de quien sabe navegar… Hemos vivido unos meses de mucha meditación y dedicación a la recomposición de cada situación que se iba presentando en cada momento, y he llegado a un convencimiento, que nos encaminamos a un mundo mucho mejor y mucho más avanzado que el que dejamos atrás. Estoy seguro de ello.
Estamos viendo un gran cambio en la humanidad y tenemos que vivirlo con toda la ilusión que podamos poner en la historia de nuestro mundo. Los humanos han sufrido grandes calamidades, ya sean naturales o no naturales, de gran magnitud, pero las hemos sobrevivido todas, demostrando que somos muy resistentes y fuertes. Hemos renacido de las cenizas y siempre creando mundos mejores que el anterior.
Nuestro sector lleva tiempo en constante transformación, pero ahora le toca el momento de un cambio profundo. El proceso tecnológico siempre ha mejorado las condiciones de vida humana y no digamos las de nuestra vida laboral , y esto unido al cambio ecológico a buen seguro dará un resultado bueno para la humanidad.
El futuro es de los que sepan adaptarse, entender la nueva situación y prepararse para afrontarla con coraje. Llegó el momento de agitar a las administraciones y hacerles entender que el contenido de cada actuación lo deben decidir las empresas. Que hay una formación online en marcha y que deben poner todos los medios para que la podamos llevar a cabo.
Generemos valor en la formación y técnicas del futuro. Nuestro sector tiene que tener muy claro que el lujo empieza donde terminan las necesidades básicas de cada persona.
No se puede decir que cualquier tiempo pasado fue mejor, porque si lo hacemos, condenamos el futuro sin conocerlo. Demos ese primer paso de un futuro ya inminente, porque si es verdad que estábamos en un caos permanente, ahora ha estallado y la solución está a nuestro alcance.
El momento ha llegado. Las herramientas están al alcance de cada uno y solo hay que saber utilizarlas. Demostremos la experiencia acumulada y el nuevo conocimiento adquirido. Mostremos las estrategias y novedades de nuestras empresas y sepamos utilizar los canales que están a nuestro alcance.
El nuevo consumidor está ahí, esperando que sepamos llegar a su puerta con la seriedad y confianza que merece. El que sepa entender la situación y cambie de actitud será el primero en recoger frutos. Nuestro sector es de los más antiguos de la humanidad y conviene recordar que no hay sustituto para la experiencia.
El ayer es la memoria del hoy, pero el mañana, nuestro sueño actual. Ahora que llega el verano y podremos salir a navegar, conviene tener muy presente que el viento siempre sopla a favor de quien sabe navegar.