El rojo vibrante combinado con una correa de piel negra y una caja de acero inoxidable plateada hacen de esta pieza un deseo para los amantes relojeros
Para esta temporada, Grand Seiko presenta dos nuevas creaciones exclusivas para Europa, inspiradas en los jardines de estanques japoneses. Una de ellas se cuela en la wish-list de esta Navidad por su estética clásica aunque rompedora, con una esfera roja que eleva la máximo la elegancia.
Aunque en el universo relojero hay unos colores que, si hablamos de esferas, predominan por encima de otros, como el icónico verde, el negro o el azul, existen otros tonos que no pasan desapercibidos y que convierten en la pieza en un imprescindible diferente. Por ello, una de las últimas incorporaciones de Grand Seiko no pasa desapercibida y se postula como un nuevo deseo que, además, destaca por los mejores acabados y una mecánica que nada tiene que envidiar a otros relojes.
En el corazón de la artesanía de Grand Seiko se encuentra la singular filosofía japonesa de valorar los sutiles cambios en la naturaleza, que se despliegan con el paso del tiempo, y las múltiples expresiones que crean la luz y la sombra. La fluidez del tiempo se plasma en las técnicas altamente refinadas de sus maestros artesanos, conocidos como Takumi, quienes impregnan cada reloj de una destreza incomparable.
Una filosofía que se alía con los jardines japoneses, un ejemplo destacado de la estética innata del país que inspira esta creación edición limitada de Grand Seiko, disponible exclusivamente en Europa. El rojo que tanto destaca de su esfera se debe a su inspiración, los Nishikigoi o carpas iridiscentes, que son un animal esencial en los estanques de los jardines Chisen Teien. La práctica de observar estas carpas ornamentales se remonta al siglo IX, cuando la aristocracia japonesa las admiraba como un pasatiempo. Hoy en día, estas coloridas carpas, conocidas como “joyas nadadoras”, gozan de gran popularidad en todo el mundo.
Por ello, el diseño del SBGW321 refleja un pez Koi japonés: una esfera en color rojo vibrante, un patrón en espiral radial que se extiende desde el centro de la misma para evocar las escamas brillantes de la carpa reflejadas por el sol en el estanque y, para culminar. una correa negra y una caja de acero inoxidable plateada. Una combinación que hacen de este reloj un imprescindible.
Además, este reloj está impulsado por el calibre manual 9S64 de fabricación propia, que ofrece un alto nivel de precisión y una reserva de marcha de 72 horas cuando está completamente cargado. Su precisión es de +5/-3 segundos por día. Esta edición limitada de 300 unidades está disponible desde el 1 de noviembre en socios minoristas seleccionados, exclusivamente en Europa.