La victoria de Trump rompe el camino alcista del oro
El oro, valor refugio por excelencia, está viviendo un año de máximos históricos. El caos geopolítico, las compras de los bancos centrales y los recortes de tipo de interés estaban siendo cómplices de este camino alcista que llevó al oro a un alza de hasta el 35% en lo que llevamos de año. Un camino que se rompe, inesperadamente, con la victoria de Trump.
Tras conquistar los 2.800 dólares por onza lo que menos nos podíamos imaginar es que, en tan poco tiempo, el metal amarillo empezara a cotizar de nuevo por debajo de los 2.600 dólares, algo que no ocurría desde el 20 de septiembre y que, después de todo, es una gran caída. Esto se debe a la reciente victoria de Donald Trump y ha pillado a los analistas por sorpresa; horas previas de conocerse los resultados de la elecciones, Ewa Manthey, analista de ING defendía que, ganase quien ganase, no habría cambios para el oro. «Lo más probable es que el oro tenga un gran desempeño independientemente de quien gane ya que los riesgos geopolíticos a corto plazo seguirán altos”. Cabe recordar además que, en la primera etapa de Trump, el oro repuntó un 55% por lo que, se esperaba que este metal precioso continuara su impulso positivo.
Que la situación no fuera como se esperaba, entre otros factores políticos ya que las políticas expansivas de Trump y los recortes de impuestos corporativos podrían ejercer presión al alza sobre la inflación y limitar el margen de la Reserva Federal para relajar su política monetaria de manera más agresiva, puede ser debido, como afirman otros analistas, a un momento de euforia excesiva que el oro estaba experimentando en el mercado. Así es que, entre una vorágine de proyecciones en cuanto a diferentes escenarios posibles tras las victoria de Trump, puede que lo que esté ocurriendo estos días es un reajuste de expectativas aunque, también es cierto que, según expertos, se espera que el oro pase por seguir con sus subidas, conquistando récord tras récord.
