En esta muestra, donde se celebra la precisión, la belleza y la importancia del tiempo, se exhiben relojes de sobremesa y despertadores de mesilla y viaje, además de los de bolsillo
Los relojes no solo marcan las horas; son herramientas esenciales que organizan nuestro trabajo y vida cotidiana, recordándonos la valiosa relación entre tiempo y productividad. Además, estos artefactos son verdaderas obras de arte e ingeniería, reflejando la evolución de la tecnología y el diseño.
En esta línea, hace unos meses ya hablamos sobre la nueva obra editada por el propio Congreso de los Diputados y escrito por el Profesor y Catedrático Dr. José Daniel Barquero, el libro«Los relojes del Ministerio de Trabajo y Economía Social«, que recoge una amplia catalogación técnica de los relojes de esta institución, comprendida entre los siglos XVIII, XIX y XX. Pues bien, ahora se materializa y llega al Museo Internacional de Alta Relojería de Bolsillo (Miarb).
La exposición, organizada por el Ministerio de trabajo y economía social, junto con el Miarb, nace tras la publicación de estas páginas, que reproducen fotográficamente, analiza y explica los relojes y las características técnicas, así como las historias, que alberga la colección del Ministerio. Gracias a los abundantes relojes que alberga el Ministerio, unido a la dedicación y estudio del profesor Dr. Barquero ha permitido a esta institución a llevar a cabo numerosos descubrimientos historiográficos relojeros.
En esta muestra, donde se celebra la precisión, la belleza y la importancia del tiempo, se exhiben relojes de sobremesa y despertadores de mesilla y viaje, además de los reconocidos relojes de bolsillo, ofreciendo una visión integral de la evolución y el significado de estos objetos a lo largo de los años.
En definitiva, la relojería, la medición del tiempo, el estudio del tiempo a través del reloj, es herencia de todos, legado ancestral y tesoro histórico invaluable que debemos conservar y apreciar.