El gigante de los diamantes ha decidido producir entre 23 y 26 millones de quilates, una reducción significativa desde su objetivo anterior de 26 a 29 millones de quilates
Después de varios meses de detectar baja demanda, De Beers, el líder mundial en la industria del diamante, ha decidido producir entre 23 y 26 millones de quilates, una reducción significativa desde su objetivo anterior de 26 a 29 millones de quilates.
A principios de este año, De Beers ya había disminuido sus expectativas de producción de una meta inicial de 29 a 32 millones de quilates. Esta nueva revisión refleja una situación desafiante para la industria del diamante, que enfrenta inventarios elevados y una demanda reducida, especialmente en mercados clave como China.
El consejero delegado de De Beers, Al Cook, explicó que «mientras la demanda en Estados Unidos se ha mantenido constante y en India sigue siendo robusta, el mercado chino ha mostrado una caída considerable en la compra de productos de lujo». Esta situación ha llevado a los minoristas a ser más cautelosos a la hora de reponer sus inventarios, exacerbando el problema de los altos niveles de stock intermedio.
En términos de ventas, De Beers reportó ingresos de 2.200 millones de dólares en la primera mitad del año, comparado con los 2.800 millones de dólares del mismo periodo en 2023. A pesar de estos desafíos, la empresa anticipa una «recuperación gradual» impulsada por factores como la reposición de existencias por parte de los minoristas y una mejora en las condiciones macroeconómicas globales.
El analista del sector Paul Zimnisky opinó que la reducción de producción es una medida positiva, señalando que «demuestra que De Beers no está inundando el mercado con exceso de oferta en busca de beneficios a corto plazo, lo que podría perjudicar la estabilidad del sector».
En cuanto a la propiedad de De Beers, el consejero delegado de Anglo American, Duncan Wanblad, mencionó que De Beers será probablemente la última de las cuatro divisiones que la compañía planea vender. Wanblad sugirió que una venta o desvinculación de De Beers no se espera hasta finales de 2025, enfatizando la importancia de encontrar «las manos adecuadas» para una eventual transacción. También indicó que, de no encontrar un comprador adecuado, considerarían una oferta pública de venta (OPV) como una opción viable.
Durante una reciente reunión con el presidente de Botsuana, Mokgweetsi Masisi, Wanblad describió las conversaciones como «muy positivas». A pesar de un acuerdo preliminar en junio de 2023, De Beers aún no ha cerrado un nuevo contrato con su mayor socio, lo que añade otra capa de complejidad a su situación actual.