Nuestra aportación al sector lo hace más rico y más fuerte
Llegó la hora de compartir cono-cimientos, actividades, luchar y tirar todos en una misma dirección. La competencia está fuera del sector, no la busquemos dentro.
Las dificultades vividas en este pasado año, con la pandemia arreciando de nuevo por Navidad, deben habernos ayudado a reflexionar y a preparar la larga carrera que se nos espera.
En este contexto vale más tomar las cosas con positividad, siempre que sea posible. Es lo del vaso lleno o medio vacío. Comienza el día con una sonrisa y verás que divertido es ir desentonando con el resto de gente.
Hasta para cometer un pecado, se necesita mucho ingenio. El requisito del éxito es la prontitud en las decisiones. Debemos ser astutos porque es la forma de vencer en el primer momento y grabar en nuestra mente que cada día es el mejor del año.
Se dice que el tiempo cambia las cosas, pero en realidad es uno mismo el que las tiene que cambiar. Todos debemos tener la certeza de que no nos faltan fuerzas, pero lo que tenemos que vigilar mas es que no nos falte la voluntad.
El bosque es alegre y divertido porque canta todo tipo de pájaros, no solo los que lo hacen bien. Pues en el bosque del sector debemos seguir el ejemplo, cada uno aportar lo mejor que sepa y sin desfallecer. Alguien dijo que todos pensamos en cambiar el mundo, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo.
Al igual que la vida está hecha para vivirla, no para comprenderla, en nuestra actividad diaria pasa lo mismo. Debemos vivir con intensidad cada minuto que dedicamos a la profesión.
Recordemos las palabras de la Madre Teresa de Calcuta: A veces sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le falta esa gota.
Nuestra aportación al sector lo hace más rico, más fuerte y lo ayuda convertirse en uno de las sectores que deben liderar la recuperación. Lo que hace más interesante nuestro trabajo es la posibiidad de realizar los sueños.