En un año en el que todo el mundo quiere llevar joyas, hay tendencias para todos los estilos
Aunque, como ya anunciamos en el análisis de tendencias vistas en Vicenzaoro, esta temporada tiene más que ver con la autoexpresión que con formas o estilos en concreto, está claro que siempre hay joyas que destacan por encima de otras y este 2025 no iba a ser de otra manera. Repasamos todas las tendencias que de verdad importan este año.
En cuestión de estilo, una estética rebelde pero refinada marcará el año a través de clásicos como eslabones con un toque industrial, collares multicharms que se lucirán en exceso y sin límites, combinados con otros collares en diferentes longitudes (porque los collares largos serán importantes esta temporada), y maxi pendientes con formas opulentas o anillos diseñados para crear un equilibrio. Por supuesto no faltarán los brazaletes con formas estructúrales, pensados para lucir por encima de las mangas de un jersey o, cuando suban las temperaturas, también a mitad del brazo; y es que, esta tendencia que ya regresó el pasado verano se queda un poco más y será clave sobretodo en la temporada estival. Si hablamos de collares tampoco nos podemos olvidar del torque, otro must que hizo su aparición por sorpresa hasta convertirse en el collar por excelencia de la temporada y, spoiler, no dejaremos de verlo.
La belleza orgánica también formará parte de este 2025 con símbolos florales y geométricas ligeras aunque las conchas, pájaros, caracolas, pulpos, peces o estrellas de mar alcanzarán su máximo momento en verano y convivirán con otros símbolos más divertidos, perfectos para transmitir personalidad y estilo; por supuesto, con lo más clásico que puede vivir en un joyero: las perlas. Un must indiscutible, este año las perlas vuelven a colocarse en un primer plano con una estética reinventada y genderless.
El maximalismo quiere convivir más tiempo con las joyas minimalistas y los clásicos de siempre como las riviere, las pulseras finas, los pendientes de botón o las iniciales se lucirán en conjunto con joyas más elaboradas, en formato maxi. De hecho los pendientes vintage en dorado liso o con texturas seguirán siendo los favoritos.
Resurgen materiales como el titanio o combinaciones estrella como el oro rosa y el negro; el oro amarillo pulido y las piedras semipreciosas que devuelven la opulencia vintage a la moda tampoco faltarán y los colores vibrantes a través de un estilo muy retro glam marcarán la temporada Primavera-Verano. La inspiración art-decó seguirá muy presente con geométricas claras y lineas arquitectónicas elegantes.
El Old Money en un regreso a los clásicos, como ya mencionamos, sigue siendo la tendencia que mejor define este 2025. Los diamantes añadirán un toque de luz a diseños limpios que son imprescindibles modernos para el lujo cotidiano.
Y, aunque todas estas tendencias forman parte del joyero desde el año pasado, las joyas personalizadas y las playfull, es decir, aquellas que ofrecen diferentes posiciones o que puedes lucir de diferentes maneras según el momento y estado de ánimo, serán, sin duda, las más deseadas de este 2025.
