Hoy se escribe una nueva página en esta historia de Chaumet y Rusia.
Lo mejor de las bodas imperiales son sus joyas, en este caso, la Tiara de Chaumet elegida por Ms. Bettarini y el gran Duque Jorge de Rusia para su boda imperial en Octubre. Una revisión moderna de la forma del tradicional kokoshnik ruso, la tiara Lacis, recientemente creada por Chaumet, se eleva para evocar el volumen de una vela soplada por el viento. Un homenaje a la base naval de San Petersburgo donde presta servicio el Gran Duque Jorge Mijáilovich, heredero de los Romanov.
Esta creación de Alta Joyería está engastada con dos diamantes de excepcional claridad: un diamante ovalado de 5,02 quilates D VVS1 y un diamante en forma de pera de 2,21 quilates D VVS2, realzados por 438 diamantes en pavé (que suman 27,03 quilates).
El efecto visual es de ligereza, resultado de la montura de malla de oro blanco realizada con la técnica del fil-couteau, un virtuosismo emblemático de la Maison, que parece hacer desaparecer el metal para dejar brillar las piedras.
Joyero oficial de la emperatriz Josefina y de Napoleón, Chaumet se distinguió en el arte de la tiara, joya soberana por excelencia, y contó con varios miembros de la Casa Romanov entre su clientela histórica. La Gran Duquesa Vladimir, tatarabuela del Gran Duque Jorge Mijáilovich, fue una fiel clienta de Chaumet. Destaca su espectacular tiara en forma de cascada de 1911, así como la tiara en forma de sol creada en 1914 para la boda de la princesa Irina Yusupova, sobrina del zar Nicolás II.
Hoy se escribe una nueva página en esta historia de Chaumet y Rusia, ya que Rebecca Virginia Bettarini ha elegido la tiara Lacis para su boda con el Gran Duque Jorge Mijailovich, heredero de los Romanov.