Las claves que convierten a una joya en un fondo de armario.
Mientras las tendencias vienen y van, siempre hay una joya en la que invertir y acertar. Con vocación atemporal y listas para elevar nuestros estilismos en cualquier momento del día, no parece tan difícil encontrar la pieza perfecta en un momento en el que los manuales de estilo cambian tan rápido si conocemos las claves que convierten a una joya en un fondo de armario.
La primera clave y la más importante es sentirnos cómodos con nosotros mismos; es decir, una pieza que se adapte a nuestro estilo y nuestra personalidad. Parece un tópico, pero la personalidad no cambia al ritmo de las tendencias, siempre se mantiene, por lo que una joya que cumpla con esas características se convertirá como en nuestra segunda piel.
En ocasiones, las joyas se mueven al compás de las tendencias aunque, en realidad, estamos ante la misma piezas con unos pequeños cambios estéticos que hacen que se adapte al momento sin perder esa vocación atemporal tan importante.
También es importante encontrar el equilibrio entre joyas que son una inversión importante y que, al mismo tiempo, se convierten en un amuleto con otras joyas que, aunque con un diseño más especial o más temporal, no pierden el valor propio de una pieza capaz de perdurar en el tiempo. Por ejemplo, las perlas se han ido reinventando temporada tras temporada, ofreciendo nuevos manuales de estilo y nuevos diseños, modernizados, pero, en realidad, nunca han dejado de ser como ese collar de perlas que siempre podremos rescatar de un joyero familiar.
7 joyas, 7 must haves
Unas criollas
Volvieron pisando fuerte y ahora, más que una tendencia, son un esencial. Un fondo de armario, una segunda piel. La joya que por excelencia se convierte en parte de nosotros. Además, su auge ha permitido que podamos encontrarla en infinidad de versiones.
Un collar de eslabones
Aunque son la tendencia por excelencia, este tipo de collares vienen de épocas pasadas y cuentan con esa estética vintage que permite que una pieza de esta estética nunca pase de moda, aunque la tendencia pueda quedarse en un segundo plano. Aquí encontramos el equilibrio entre las tendencias del momento con una inversión a largo plazo.
Y una pulsera
Los eslabones se han traslado a todas las joyas, transmitiendo la atemporalidad con un aire nuevo. Una pulsera de eslabones con un charm colgante es la pulsera por excelencia que no falta en el joyero. Un clásico, un regalo especial o una inversión para uno mismo.
Unos pendientes largos y sofisticados
La tendencia del On Screen ha escrito un nuevo capítulo en el mundo de la joyería; un capítulo que marca un antes y un después y que se quedará aquí para siempre. Por ello, piezas maxi aunque sofisticados y sutiles, con un diseño atemporal, son otro must en el joyero.
Un clásico
Un collar versátil y atemporal Chapado en Oro de 18 ktes. El icónico collar “Snake Chain” que tanto arrasó en décadas anteriores y ahora se ha convertido en el accesorio estrella de la tendencia actual se convierte en la opción perfecta para aquellos amantes de la moda y de la simplicidad y la sencillez a partes iguales.
Un anillo sello diferente
Fueron y son tendencia. Pero lo cierto es que un anillo es mucho más que eso, y su significado abarca desde tradiciones familiares hasta estéticas callejeras. Un anillo sello es mucho más que un anillo y, por ello, es la pieza más deseado. Un clásico que no puede faltar y que ofrece la posibilidad de marcar la diferencia. ¿Cómo? Con un diseño original y reeditado.
El toque de color
Las joyas coloridas son la última tendencias y mucho tiene que ver con las ganas de recuperar nuestro día a día tal y como lo conocíamos y por esa ilusión de volver a celebrar. El color pone la alegría en nuestros estilismos y las joyas no querido quedarse atrás para transmitir esa ilusión. Una vez más, es posible encontrar la pieza perfecta a caballo entre tendencia y atemporalidad.