“El valor de ser creativo está en alza y te diferencia”
Pedro Ferreiro se ha hecho recientemente con uno de los premios de diseño de joyería más prestigiosos a nivel mundial, el JMA Internacional Design Competition 2017, concretamente en la categoría de mejor diseño 3D.
¿Qué supone para usted este reconocimiento?
Como diseñador todo reconocimiento te aporta una mayor proyección de tu carrera. Los concursos son retos personales, en especial este tipo de certámenes donde tienes la posibilidad de realizar el proyecto sin construir la pieza, ya que te permiten dar vida a proyectos espectaculares donde no tienes que pensar en costes de producción.
El diseño 3D ya es el futuro de la joyería. Los conocimientos de diseño y el oficio de joyero aplicados con las nuevas tecnologías permitirán evolucionar en el mundo del diseño hacía donde antes nunca había estado el sector joyero.
¿En qué se inspiró para realizar la joya y por qué motivo?
Este certamen tenía como título “Tressor” (Tesoro); mi workshop desarrolló el concepto partiendo de lo que significa esta palabra y cómo la puedo definir para aplicarla a un proyecto. Cuando recibo un encargo busco una historia que me inspire. En este concurso a nivel mundial quería transmitir que el mejor tesoro que tiene la humanidad es nuestro planeta. Para mí, que vivo en una pequeña isla donde casi la tercera parte de ella está protegida, es casi es una obligación contribuir con esta forma de pensar. De ahí nació “Chrysaora”, que es el título de mi pieza.
¿Sabe el número de diseños que también concurrían al certamen?
El número de diseños participantes fue de 286 propuestas.
¿Cuándo tuvo lugar la entrega de los premios de este concurso, organizado por la Hong Kong Jewelry Competition y la revista HKJE? ¿Qué comentaron los organizadores en su presencia?
La ceremonia de entrega tuvo lugar el pasado 30 de noviembre en el Centro de Convenciones de Hong Kong en un acto muy emotivo, donde la presencia de diseñadores y de patrocinadores, así como de medios te sirve como toma de contacto con centros de formación que se interesan por tu trabajo.
Nos consta que es usted un diseñador muy laureado a nivel inter- nacional. ¿Qué destacaría de su trayectoria?
Puedo presumir que soy el único español que está galardonado con un Diamond Internacional Award en 1992 y 2000 como finalista. Fue el concurso de diseño que organizaba De Beers más importante y que las empresas italianas exhibían como supremacía del diseño.
Este me dio mi primera oportunidad de trabajo como diseñador con una empresa japonesa y me marché a trabajar a Tailandia. Desde entonces he continuado trabajando y realizando colecciones para varias firmas y para mis clientes, algunos encargos importantes para personalidades, así como en varias ocasiones para la Casa Real a través de encargos institucionales.
Usted realizó sus estudios en la Massana de Barcelona, es también gemólogo especializado en diamantes y estudió diseño en Milán. ¿Qué opina sobre la formación en este sector? ¿Qué mensaje transmitiría a los jóvenes que se han decidido por estudiar este oficio?
En cuanto lo que fue mi formación, le puedo decir que me gradué en todas las escuelas que había en el momento con unos resultados brillantes. Fui becado para continuar en Italia, pero también pasé por los mejores talleres de Barcelona; el oficio lo aprendí en los talleres de Octavio Sardá.
Como mensaje al que empieza en esta profesión y que es importante transmitir, yo le diría que diseñar joyas no es dibujar joyas. A diseñar joyas se empieza por ser artesano de la joyería. El conocimiento de la profesión es el mejor método para empezar. Hay que tener ciertas aptitudes hoy en día aparte de ser buen dibujante; se deben dominar los programas infor- máticos que nos ayudan a obtener mejores resultados.
¿Y de qué se siente especialmente orgulloso?
Pues de ser diseñador de joyas y de vivir de ello, pues es una profe- sión en el sector de la joyería, aunque parezca paradójico, poco valorada. Yo hace casi 30 años que me dedico a ello, y cuando analizo a las empresas a las cuales yo visitaba con mi dossier proponiendo colecciones, veo que solo quedan aquellas que apostaban por el diseño, las que arriesgan por hacer cosas nuevas. Aquellas en las que el diseñador era la “hija del dueño “, sin formación ni conocimientos, ya no existen. Ser diseñador y hacer colecciones casi siempre en el anonimato porque representas a una firma que te compra es una opción; también es otra intentar tener tu propia firma, cosa más complicada.
Es usted valiente pese a los tiempos que corren. Ha inaugurado estos días una nueva tienda. ¿Cuántas tiene, dónde y qué concepto trans- miten?
Yo he continuado el negocio familiar, pero he tenido que reinventarme no solo con lo que vendo, sino con lo que diseño para mi tienda. Hoy en día cuento con varios talleres que fabrican pequeñas series y esto antes de la crisis era impensable. La competencia que llegó a los talleres me ha permitido que realicen más colecciones sin tener que acumular mucho stock, pero sobre todo lo que nos ha ayudado es el abaratamiento del modelaje, ya que proporcionamos todo preimpreso en 3D para hacer colecciones y rotarlas más.
La nueva tienda es una ampliación de la primera tienda que fundamos en 1994 en una casa que tiene 500 años en el casco histórico de mi ciudad. He diseñado de todo, lámparas, mobiliario… El resultado ha sido espectacular, un espacio único donde integro el pasado con el futuro, lo rústico con lo moderno.
¿Qué diría a quienes opinan que no son tiempos para jugársela con un negocio joyero dada la alta competencia de otros sectores?
Yo creo en lo que hago, el esfuerzo es considerable pero somos un sector único en cuanto que somos muy distintos unos de otros. El joyero creativo tiene muchas más posibilidades de sobrevivir. La joyería media está dividida en un 50% de marcas de relojería y es aquí donde realmente el mercado es muy duro. Todo está en la red con descuentos importantes. El otro 50% es joyería, y las marcas que realizan sus colecciones o cuentan con diseñadores son las que sobrevivirán. El valor de ser creativo es un valor en alza; el público quiere la joyería creativa accesible. Algunas marcas lo consi- guen y son las que tienen público. Incluso las grande firmas realizan colecciones con materiales que no son los tradicionales, oro, plata…, y funcionan porque apuestan por el diseño como valor añadido. El valor refugio del oro se ha desplazado para un sector del público.