Un reloj que mantiene la reputación de Maurice Lacroix al ofrecer un estilo único, artesanía suiza y un alto valor percibido
El nuevo AIKON Master Grand Date Black de Maurice Lacroix se presenta en tonos negros y blancos, jugando de forma ingeniosa con los contrastes, para dar lugar a un aspecto llamativo. Este reloj aprovecha el virtuosismo mecánico de la colección Masterpiece y, al mismo tiempo, adopta el diseño urbano de AIKON. El resultado final consiste en un reloj que mantiene la reputación de Maurice Lacroix al ofrecer un estilo único, artesanía suiza y un alto valor percibido.
Maurice Lacroix tiene su sede en Saignelégier, una pintoresca localidad situada en el Jura suizo. En los confines de su taller, la marca emplea su vasta experiencia, elaborando expresiones maravillosas de alta relojería. De hecho, es aquí donde se fabrican los populares modelos AIKON junto con la colección Masterpiece de alta gama de la firma, una colección de relojes equipados con un movimiento de manufactura.
En 2021, Maurice Lacroix lanzó el AIKON Master Grand Date, un reloj que une el virtuosismo mecánico de la colección Masterpiece con el diseño urbano de AIKON. Ahora la marca se complace en anunciar el lanzamiento de una nueva versión de este último modelo, el AIKON Master Grand Date Black, un reloj que yuxtapone con estilo tonos negros y blancos.
El AIKON Master Grand Date Black se presenta en una caja de acero inoxidable de 45 mm, de proporciones generosas y con revestimiento de DLC negro. Su aspecto discreto y ligeramente melancólico le confiere una elegancia natural.El reloj consigue transmitir su significado y, al mismo tiempo, muestra los numerosos componentes del movimiento en marcha. La base de la esfera con cepillado vertical y DLC negro refuerza el carácter discreto del reloj.
Las horas y los minutos predominantes se muestran en una esfera descentrada realzada con Clous de Paris, mientras que el pequeño segundero se sitúa al lado. Un movimiento de cuerda automática de la manufactura, el calibre ML331, se encuentra en el corazón del reloj demostrando así el saber hacer relojero de la firma. Un complejo mecanismo situado a las 10 horas con dos discos de fecha confiere una indicación de gran formato altamente legible.
En consonancia con otros modelos de la colección AIKON, la caja prescinde de las asas convencionales e integra la correa dentro de la caja, lo que proporciona un impresionante grado de comodidad. Maurice Lacroix ha optado por equipar el modelo con un nuevo estilo de correa de caucho que incluye el nombre de la marca en relieve, así como con una segunda correa de piel sintética con efecto textil que incorpora el ya emblemático logotipo «M» de la marca. Está dotado del sistema de cambio rápido de correa que permite cambiar de una correa a otra sin necesidad de usar ninguna herramienta.
Con esta última creación, Maurice Lacroix ha dado un paso en innovación, a la vez que ha mantenido los notables puntos fuertes del AIKON: un diseño logrado, la artesanía suiza y el alto valor percibido.