«Dedicación y transparencia a la vista de todos».
Luis Miguez Relojeros estrena nuevas instalaciones para la reparación de alta relojería suiza; como ellos mismos indican «a principios de 2021, la necesidad de más espacio y mayor transparencia nos hizo cambiar a unas instalaciones nuevas. Un nuevo taller de alta relojería suiza donde realizar reparaciones en relojes de gamas media y alta, buscando siempre la excelencia en el servicio y la atención al cliente«.
En Luis Miguez Relojeros están certificados y cualificados para la perfecta reparación y restauración de relojes de las marcas Rolex, Omega, Breitling, Audemars Piguet, Patek Philippe, Montblanc, Tag Heuer, Graham, Anonimo, Vulcain, Hublot, Mido, Bulgari, Cartier, Vacheron Constantin, Jaeger-LeCoultre, IWC, Tudor, Chopard, Gerard Perregaux, Oris, Bell & Ross, Zenith, Longines, Tissot, Certina, Hamilton, etc.
Esta experiencia y reputación se une a la filosofía de Luis Miguez Relojeros: transparencia en todos los procesos. Por ello, han decidido optar por espacios más abiertos y claridad en la forma de trabajar a la vista de todos. «Es una forma clara de poder mostrar visualmente, todo el proceso que conlleva la restauración de relojes de alta gama. Información y claridad es fundamental en toda la cadena de reparación de relojes. Es sin lugar a dudas, lo que nos destaca como un referente en reparaciones de alta relojería suiza«.
Un lugar cálido y cómodo para atender a los clientes y para que ellos disfruten de todos los objetos de este pequeño homenaje que Luis Minguez dedica a la relojería más tradicional. Y un lugar que demuestra que, incluso en tiempos difíciles, es posible continuar adelante y apostar por lo que más nos representa.
Vanguardia y tradición en un solo lugar
Algo que caracteriza a estos relojeros es la pasión por la tradición y un enorme respeto por nuestros orígenes, por eso han decidido compartir con sus clientes la esencia de la relojería antigua, y animarles a que se adentren en el nuevo establecimiento, donde lo antiguo y lo moderno confluyen en un solo lugar.
«El cliente podrá observar nuestro pequeño museo de relojería, donde se exponen las herramientas que utilizaban antiguamente los maestros relojeros que nos precedieron, ya que sin lugar a dudas, estamos profundamente ligados a ellos».
El taller
El taller de Luis Minguez Relojeros está divido en cinco zonas segmentadas en áreas estancos, según la actividad:
Por un lado se encuentra el laboratorio de montaje, la zona más crítica del taller y un lugar sellado y aséptico libre totalmente de polvo donde se analizan los fallos y se realiza un minucioso diagnóstico del reloj para identificar cualquier fallo o imperfección.
Es una zona restringida y totalmente equipada con las mejores máquinas para analizar y testar cada uno de los posibles fallos que puede tener un reloj. Es además, donde está destinado el stock de repuestos de todas las marcas de relojería. Así mismo, dispone de una zona habilitada en esta primera sección, donde se realiza el lavado de los movimientos antes de ser montados de nuevo.
Otro zona es la de restauración estética, en la que se encuentra toda la maquinaria necesaria para dar una terminación exactamente igual a la que el reloj traía de fábrica. Tornos, pulidoras, matizadoras, facetadoras, etc. Incluso la posibilidad de reparar golpes e impactos más fuertes aportando material mediante técnicas de láser o tig. «Somos especialistas en la restauración de cajas y pulseras de relojes, utilizando numerosas técnicas de pulido y soldadura para dejar los relojes como nuevos«.
La tercera zona es la zona de limpieza externa, un espacio reservado para la limpieza externa de cajas y brazaletes. «En Luis Miguez Relojeros somos conscientes del deterioro del medio ambiente y la problemática de utilizar disolventes y detergentes. Por este motivo hemos desarrollado unos procesos de limpieza que se basan en vapor a presión y ultrasonidos, en los que no se utilizan agentes contaminantes. El resultado es una limpieza profunda en el interior de eslabones y zonas inaccesibles de las cajas y brazaletes«.
La cuarta zona, destinada al control de calidad y verificación, es donde permanecen los relojes reparados en comprobación durante una semana antes de pasar a expedición. Ésta zona contiene simuladores de carga y comprobadores de marcha. Los simuladores de carga simulan el movimiento humano en relojes automáticos mientras que los comprobadores de marcha miden los parámetros de funcionamiento de los relojes en tiempo real. También se comprueba el aspecto estética para asegurar que no presente cualquier elemento que no este acorde con esa reparación.
Por último, la zona de administración y expedición, donde se realizan varias tareas administrativas como la recepción de las reparaciones, facturación y envío final de los relojes reparados. También es donde se gestiona el servicio de atención al cliente.
Además de estas cinco zonas, en las nuevas instalaciones también se podrá disfrutar de una sexta zona, dedicada a la atención al cliente y un museo. «Éste espacio claramente refleja nuestra filosofía de la sostenibilidad, la tradición y la economía circular. Queremos mostrar con objetos que nos rodean, objetos de gran calidad que son olvidados y apartados, que se pueden integrar perfectamente en ambientes modernas tanto para uso como para decoración«.