El nuevo informe de World Gold Council demuestra la situación actual del oro y de la joyería de oro, afirmando una recuperación tras la situación del año pasado.
Tras el impacto del año pasado, la demanda en joyería de oro se recupera en el primer trimestre a pesar de mantenerse moderada en comparación con los niveles históricos del 2020. De esta manera, la demanda ascendió a 477,4 toneladas en el primer trimestre, un aumento del 52% internanual, lo que supone una fuerte mejora en comparación con el primer trimestre del 2020. India y China fueron los motores de recuperación, generando la gran mayoría del crecimiento interanual mundial. Así lo demuestra el último estudio de World Gold Council.
El oro y la joyería de oro siguen recuperándose tras la difícil situación del año pasado a pesar de que todavía queda mucho camino por recorrer para volver a los niveles anteriores a la pandemia. Aunque el mayor sufrimiento se vivió en el primer y tercer trimestre de 2020, la demanda de joyas de oro se recuperó ya a finales del año pasado, continuando con esa recuperación en el primer trimestre del 2021.
El primer trimestre es tradicionalmente un trimestre débil, estacionalmente para la demanda de joyas de oro y, por lo general, cae desde el cuarto trimestre. La caída porcentual trimestral en el primer trimestre de 2021, de solo el 7%, fue mucho menor de lo que hemos visto en los últimos años, ya que los consumidores continuaron recuperando las oportunidades perdidas en 2020 y beneficiándose de los precios más bajos del oro.
Destaca también que, la demanda de joyería en términos de valor estuvo muy por encima de los niveles promedio en los últimos años. El valor del gasto en joyería alcanzó los US $ 27.500 millones, el primer trimestre más alto desde el primer trimestre del 2013 y un 25% por encima del promedio trimestral de cinco años de US $ 22.100 millones.
En cuanto al oro, la demanda de oro del primer trimestre (excluyendo OTC) fue de 815,7 toneladas, prácticamente a la par con el cuarto trimestre de 2020, pero un 23% menos en comparación con el primer trimestre de 2020. La oportunidad de comprar a precios más bajos, en relación con los máximos observados el año pasado, impulsó la demanda de los consumidores, especialmente porque muchos mercados continuaron emergiendo del bloqueo y la recuperación económica levantó la confianza.