El número sesenta es uno de los números más fundamentales en relojería.
A finales de la década de 1950, los mejores relojeros de Seiko se unieron con un objetivo simple pero ambicioso: crear el reloj con los más altos niveles de precisión, legibilidad, durabilidad y facilidad de uso. En diciembre de 1960 nació su primera creación y le llamaron Grand Seiko. Tenía un nivel de precisión superior al estándar del cronómetro de esa época y marcó el primer paso de un viaje de sesenta años hacia la cumbre del arte de la relojería.
Este año se cumple el 60 aniversario de este gran logro. El número sesenta es uno de los números más fundamentales en relojería, pero, en Japón, además, tiene un significado adicional como el “momento de energía renovada y renacimiento”. Hoy, para comenzar un año completo de celebraciones de este importante hito, se lanzan cuatro nuevos relojes para señalar el camino hacia los próximos sesenta años de la vida de Grand Seiko. Los cuatro nuevos modelos tienen esferas en el color azul característico de Grand Seiko, y cada uno ejemplifica un aspecto distinto de la amplia gama de experiencia y artesanía que Grand Seiko ha conseguido a día de hoy.
La celebración del 60 aniversario comienza con dos relojes automáticos que son inconfundiblemente Grand Seiko. El reloj para hombre rinde homenaje al famoso 44GS de 1967, cuyo diseño fue la primera expresión del exclusivo estilo japonés Grand Seiko que, desde entonces, ha sido su firma visual. Cuenta con el calibre 9S85 de alto rendimiento que ofrece una precisión de +5 a -3 segundos al día y una reserva de marcha de 55 horas. En honor al 60 aniversario, el símbolo Grand Seiko está en oro y el segundero está en un color rojo vivo, colores que, juntos, simbolizan el amanecer y la nueva energía.
El reloj automático para mujer funciona con el calibre 9S27, un movimiento automático diseñado específicamente para la colección de mujer de Grand Seiko. Ofrece un equilibrio perfecto entre precisión (+8 a -3 segundos al día), reserva de marcha (50 horas) y delgadez. Tiene una esfera de madreperla, en el azul Grand Seiko y, por supuesto, tiene diamantes como marcadores de hora y lleva un bisel con 45 diamantes. Ambas creaciones estarán disponibles en febrero de 2020 como ediciones limitadas; 1.500 piezas para el reloj de hombre y 300 para el de mujer.
Un nuevo calibre de cuarzo fácil de usar
Este 60 aniversario también se celebra con un nuevo movimiento de cuarzo. El calibre 9F85 tiene una función de ajuste de diferencia horaria que permite ajustar la aguja de horas sin detener la aguja de segundos y, por lo tanto, conserva su alta precisión cuando el usuario cambia de zona horaria. Este nuevo calibre se presenta con dos diseños para el 60 aniversario. El primero tiene una versión del Calibre 9F85, que se ajusta especialmente a un nivel de precisión de ± 5 segundos al año. Esta alta precisión está marcada por la estrella de cinco puntas en la posición de las seis. La esfera también tiene un patrón único de 2020, que recuerda al usuario lo especial que es este año. El diseño de la caja es moderno con un bisel delgado, lo que permite que la esfera sea más ancha y, por lo tanto, más legible. El lateral de la caja tiene una curva pronunciada para que se refleje más luz y potencie el «destello de calidad», parte esencial del estilo Grand Seiko. El segundero de este reloj también está en un tono rojo vivo. Estará disponible en marzo de 2020 como una edición limitada a 2.500 piezas.
El segundo reloj con el nuevo calibre de cuarzo, se une a la Colección Sport. Además de la esfera azul Grand Seiko, presenta un bisel de cerámica del mismo color que es casi inmune a los arañazos. Los marcadores y las agujas de horas y minutos están recubiertos con LumiBrite, para aumentar la legibilidad de la hora incluso en condiciones de poca luz. Ofrece una resistencia al agua de hasta 20 bares, una resistencia magnética de 16,000 A/m y una corona de rosca para mayor seguridad. Estará disponible en abril de 2020 como una edición limitada a 2.000 piezas.