Los calibres de Manufactura se han convertido en un elemento característico de Frederique Constant y juegan un papel importante.
Desde el año 2004, Frederique Constant crea sus propios calibres, diseñados, producidos y ensamblados internamente. Este paso resultó de particular importancia para que la marca ganara independencia, consiguiera un mayor control sobre la línea de producción, mejorara la calidad y acelerara la entrega de sus productos. Los calibres de Manufactura se han convertido en un elemento característico de Frederique Constant y juegan un papel importante en la estrategia de la marca de cara al futuro.
El nuevo movimiento FC-712
El calibre de Manufactura más reciente es el movimiento automático FC-712, 29ª incorporación a una colección que se amplía constantemente. Se basa en la emblemática serie de movimientos FC-700 de Frederique Constant y se ha rediseñado para dividir las fases lunares y la fecha en dos nuevos contadores. Ambas funciones se pueden ajustar con la corona. A través del fondo transparente, el movimiento exhibe las célebres decoraciones perlado y Côtes de Genève circular presentes en todos los calibres de Manufactura de Frederique Constant. El departamento de I+D y los relojeros de la marca necesitaron dos años para perfeccionar este movimiento y poder comercializarlo.
El reloj
El reloj se presenta en tres versiones, combinando una esfera plateada o azul marino con una caja de oro rosa o de acero inoxidable pulido. La caja de 42 mm, dividida en tres partes, cuenta con un fondo de cristal de zafiro convexo transparente que permite observar el funcionamiento del calibre FC-712 y proporciona una reserva de marcha de 38 horas. Los dos contadores de fases lunares y fecha se encuentran situados a las 3 y las 9 horas, respectivamente. La elegante esfera curvada se funde de forma impecable con la caja que presenta números romanos impresos y agujas pulidas a mano. Por último, la correa de piel de becerro de estilo cocodrilo marrón oscuro, negra o azul completa el aspecto del reloj.