Joyas como las de una reina. Así se podía catalogar al espléndido joyero de Esperanza Chávarri Aldecoa, condesa de Villagonzalo. Dama de honor de la reina Victoria Eugenia, esposa de Alfonso XIII y un buen gusto por la joyería. Ahora sus herederos se están desprendido de estas magnificas piezas a través de diferentes subastas,
La última pieza en venderse ha sido una tiara que se compró el pasado miércoles en la casa de subastas Bonhams, por 184.420 euros.
Es la primera vez que la tiara salía al mercado, tal y como ha informado Bonhams, pues llevaba en manos de la familia de la aristócrata más de 110 años. Diseñada como una diadema doble puede desprenderse para formar dos tiaras separadas, una de las cuales está concebida para convertirse posteriormente en una gargantilla.
Es una de las piezas de joyería que se vendió más cara el miércoles en Londres. La casa Bonhams sacó a la venta varios lotes y la tiara de la condesa de Villagonzalo se vendió por 182.420 euros. La espectacular diadema de brillantes es desmontable y se convierte en dos piezas individuales, lo que la hace casi única.
Elaborada hacia 1900 por la madrileña casa Ansorena, de la calle Alcalá, la tiara es una joya de la Belle Époque. La parte superior tiene motivos griegos, flores nomeolvides y hojas de laurelen representación del auténtico amor. La parte inferior está realizada con imágenes de puntillas y lacitos, todo alrededor de un brillante cortado en forma de rosa.
“Esta tiara tiene una factura impecable y el elegante diseño de coronas y flores de diamantes de estilo Luis XVI posee una ligereza y una calidad de encaje única, solo posible gracias a la libertad técnica y la innovación de trabajar en platino, un metal tan liviano como sólido. Los joyeros solo comenzaron a entender cómo explotar realmente el platino alrededor de 1900, por lo que es particularmente interesante que esta tiara aparezca en los archivos de Ansorena como concebida ya en 1890”, según afirma Johann Leibbrandt, consejero delegado de Bonhams en Madrid.
La reina Victoria Eugenia, o Ena de Battemberg, poseía maravillosas joyas de Ansorena y su famosa tiara flor de lis de diamantes es una de las piezas más significativas del joyero de la Corona española, una corona que lució la reina Letizia por primera vez en febrero de 2017.
La condesa de Villagonzalo gozó del privilegio de acompañar a la reina, algo a lo que solo accedían las mujeres que poseían el título de grande de España. Esa condición, la del título nobiliario y, sobre todo, la de dama de la reina, confería a las ‘amigas’ de la monarca el acceso a propiedades especiales. Como las joyas, de las que ahora su familia se está desprendiendo poco a poco.