El complejo joyero italiano reanudó ayer su actividad bajo un sencillo protocolo común, en el que se incluye la toma de temperatura tanto a sus asociados como a colaboradores y clientes. Y prohibido el uso de ascensores comunes. Recordemos que su recinto, próximo a Nápoles, acoge a 400 empresas.
¡Volvemos a trabajar! El 4 de mayo Il Tarì reprendía su actividad con todas las empresas establecidas en el mismo, y todo transcurrió con normalidad. El complejo joyero, que se halla ubicado en Marcianise, Italia, muy próximo a Nápoles, acoge 400 empresas del sector y servicios afines. Su ejemplo de protocolo es por ello muy ilustrativo en el acceso y la reanudación de la actividad regular para otros complejos, empresas y pymes. Y un acertado consejo en la desescalada tras el COVID-19: «La cooperación de todos será la mejor contribución a compartir con serenidad».
El protocolo de Il Tarì incluye reglas de acceso, salida y convivencia en el interior del complejo para todos los asociados, colaboradores y clientes con el objetivo de «la mejor garantía para afrontar la seguridad en la fase de reinicio de nuestra economía». Se trata de unas pocas normas internas que transcribimos:
- A la llegada, letreros especiales para dirigir a los automóviles a la entrada indicada para acceder a sus respectivos estacionamientos.
- Acceso condicionado a todos los usuarios por la medición de temperatura corporal, que no deberá exceder los 37.5°. Esta se mide por termoscanners ubicados tanto en la entrada del recorrido del perímetro como en la entrada principal. En cumplimiento de la política de privacidad, se garantiza que estos datos recopilados no serán almacenados ni divulgados.
- Obligatorio el uso de mascarilla y guantes para todos los usuarios.
- Establecimiento de dos corredores diferentes en la entrada principal, para entradas separadas de personas con y sin acreditación.
- Acceso a los garajes exclusivamente para estacionar automóviles, en los que se han desactivado los ascensores. Acceso peatonal al Tarì exclusivamente a través de la entrada principal.
- Entrada de proveedores, correos y servicios de mensajería partir de las 10.30 h.
- Prohibido usar ascensores, excepto por necesidades especiales.
Finalmente Il Tarì garantiza, en todas las áreas y oficinas comunes, el cumplimiento de los procedimientos de desinfección de los espacios y la introducción de elementos útiles para el distanciamiento interpersonal y el saneamiento de manos. Los servicios de catering del centro permanecen aún cerrados.
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