El ideal está en ti, el obstáculo para su cumplimiento… también está en ti. Siempre los primeros tiempos nos dan el texto, los siguientes, el comentario.
Plantar otro árbol en el nuevo día, ese ha de ser nuestro objetivo. La obra humana más bella es la de ser útil a otro y así es como nos sentimos todos dentro de este maravilloso sector joyero-relojero en que nos encontramos. Pero no olvidemos que el joven conoce las reglas, pero el viejo, las excepciones.
En estos tiempos que nos ha tocado vivir, es más necesario que nunca ser solidarios y ser capaces de desarrollar ese valor que tenemos de poder actuar como un todo dentro del sector; de compartir intereses y necesidades entre nosotros, gracias a lo que nos une. En situaciones difíciles es cuando el solidario saca todo lo que lleva en su interior.
Homero nos decía que más llevadero es el trabajo cuando muchos comparten la fatiga. Y Séneca añadía: » No hay bien alguno que nos deleite si no lo compartimos”. Solos somos mortales, juntos somos eternos. Hemos nacido para colaborar. Formamos parte de un cuerpo que solo si sus miembros están unidos son capaces de funcionar y sacar de sí todo lo mejor.
Alguien dijo que hay que unirse, no para estar juntos, si no para hacer algo juntos. Los fuertes no debemos tirar a nadie, sino ayudar a levantar a otro. Nosotros hemos llegado a este sector para ayudar, para lo que están algunos en él…no lo se.
Durante este año debemos haber comprendido que el bienestar de nuestro sector ha dependido de la unidad entre todos los que lo formamos; si no hemos logrado esto, hemos fracasado. Sentimos una imperiosa necesidad de trabajar juntos y disfrutar haciéndolo.
Una frase casi perfecta de Swani Vivekamanda: “En este caos existe la armonía, en estos sonidos discordantes hay una concordia y el que está preparado para escuchar, captará la melodía”. Y para captar en cada momento la amistad y unidad, debemos llevarla siempre con nosotros.
Durante muchos días hemos tenido tiempo de aprender muchas cosas y lo maravilloso de ello es que nadie podrá arrebatarnoslas. Mucha gente ha visto esto como una tormenta, pero lo importante es saber que, después de ella, el sol siempre vuelve a brillar.
Imagen: Valentin Schönpos en Pixabay