Una forma radicalmente nueva de construir se transpone en la joyería, combinando pureza de línea, volúmenes llamativos y virtuosismos notables.
Si nos fijamos en el repertorio estilístico de Chaumet, veremos que su mayor fuente de inspiración es la arquitectura. Uno de los pilares en cuanto a estilo se refiere que está presente desde hace 240 años y que además ahora forma parte de la nueva colección temática de Alta Joyería Perspectives. Palmetas y meandros, pergaminos y rosetas, frisos y encajes han adornado constantemente las creaciones históricas de la Maison, reflejando las diversas evoluciones artísticas de su época, celebrando los edificios de aquí y de otros lugares.
Perspectives, la última colección de Chaumet, reinterpreta este tema fundador y se inscribe en la sucesión patrimonial, con un enfoque resueltamente contemporáneo e innovador que rinde homenaje a los grandes movimientos de la arquitectura internacional. La Maison atraviesa los siglos para ofrecer una visión singular de los estilos y de las diferentes construcciones: desde el Renacimiento italiano hasta el deconstructivismo contemporáneo, pasando por el constructivismo ruso, Bauhaus y el futurismo italiano.
Seis nuevas estéticas
Perspectives de Chaumet amplía la idea de la arquitectura con seis nuevos conjuntos interpretando, al mismo tiempo, seis estéticas: Horizonte, Lux, Lacis, Ondulación, Espejismo y Laberinto. Una colección que supone un sutil equilibrio entre patrimonio y modernidad, entre clasicismo, creatividad deslumbrante e innovación continua, entre gracia y carácter, forjando la imagen implícita de lo que Chaumet es hoy.
Revisando la tradición de las joyas transformables que ha distinguido a la Maison desde principios del siglo XIX, Perspectives de Chaumet ofrece también creaciones inspiradas en la evolución de los edificios. Ya sea una diadema para construir o deconstruir, un anillo modular o esferas deslizantes para transformar un reloj en una pulsera, varias joyas pueden ser apropiadas para proporcionar un look personalizado.
Por último, el oro pone de relieve piedras extraordinarias -esmeraldas colombianas, zafiros birmanos, ópalos australianos que parpadean hipnotizadoramente- cuidadosamente seleccionadas por su rareza y la riqueza de su tonalidad, creando composiciones preciosas y armoniosas que expresan el renombrado arte del color de Chaumet.