El grupo suizo Richemont nombró el lunes director general a su actual director de operaciones Jérôme Lambert. Su misión será ayudar a uno de los mayores conglomerados de lujo, propietario de Cartier, Montblanc, Azzedine Alaïa o Chloé, a adaptarse a los cambios de hábitos de consumo y a devolver sus marcas de relojes al buen camino.
Richemont, que controla también IWC y Piaget, llevaba sin director general un año y medio, desde la jubilación de Richard Lepeu. Hasta ahora un comité ejecutivo se encargaba de la gestión del grupo. Entonces, los nombres de Jérôme Lambert y Georges Kern sonaban como posibles candidatos para el puesto de director general, pero Georges Kern pasó a liderar la marca rival Breitling.
«La nueva función de Jérôme será asumir la responsabilidad del crecimiento futuro del grupo en un momento en que los hábitos de consumo están cambiando significativamente«, declaró el accionista principal de Richemont y presidente del consejo de administración, Johann Rupert, en un comunicado.
Richemont registró un aumento de ventas del 10 % a tipo de cambio constante durante los cinco meses anteriores al 31 de agosto, impulsado por las fuertes ventas de sus marcas de joyería Cartier y Van Cleef & Arpels, particularmente en Asia Pacífico y en la región de América. Incluyendo las plataformas en línea adquiridas recientemente Yoox Net-a-Porter (YNAP) y Watchfinder, las ventas a tipo de cambio constante aumentaron en un cuarto hasta los 5670 millones de euros en cinco meses, tal y como indicó el lunes el grupo Richemont.
«Todas las regiones, salvo Oriente Medio, han registrado un crecimiento. Hong Kong, Corea del Sur y Macao han visto un crecimiento de dos dígitos, mientras que China también ha experimentado un buen crecimiento» declaró el grupo con sede en Ginebra. Las ventas de las marcas de relojería del grupo solo aumentaron un 4 %, y Richemont sigue ajustando stocks y comprando productos no vendidos de sus socios comerciales.