A pesar de la situación y su crisis, los relojes antiguos viven un buen momento entre los coleccionistas y apasionados de esta industria.
Heritage Auctions, la mayor casa de subastas fundada en Estados Unidos, confirma que en su última subasta celebraba el pasado martes “Watches & Fine Timepieces Auction”, el resultado superó en más del doble las expectativas, dejando claro que, a pesar de la situación y su crisis, los relojes antiguos viven un buen momento entre los coleccionistas y apasionados de esta industria.
Una subasta en la que participaron más de 1.100 personas de todo el mundo, con un resultado final de $ 5,551,889 millones, más del doble de la estimación previa a la subasta de $ 2.7 millones. Existen varias razones que explican este notable resultado, además de la docena de piezas relojeras antiguas y muy especiales; sin ir más lejos, el principal lote se trata de un Richard Mille RM 11-03 fabricado en 2018 con motivo de los 50 años de Jean Todt. Este cronógrafo Flyback abrió la oferta con $ 52,500 y finalmente se vendió por $ 325,000.
Como indica Keith Davis, director de Fine Timepieces de Heritage Auction en Nueva York “una subasta celebrada en circunstancias extraordinarias que trajo resultado extraordinarios. Los coleccionistas tuvieron mucho más tiempo para concentrarse en su pasión y, además, nosotros ofrecimos algunos de los relojes más raros del mundo. Los resultados hablan por sí solos”.
La semana pasada, el medio WWD señaló que «el mercado de relojes antiguos sigue siendo saludable y fuerte, y parece estar prosperando en medio de una pandemia mundial”. Y, aunque ningún resultado reciente se acerca al éxito de esta última subasta, parece que este mundo empieza a establecer un nuevo estándar. Además, tal y como explica Heritage Auction, el confinamiento nos ha brindado tiempo suficiente para nuestras cosas, por lo que, como bien decían antes, los coleccionistas han tenido más tiempo para desarrollar su pasión y, al mismo tiempo, hemos aumentado nuestro interés por hacer aquellas cosas que realmente nos motivan.
Un gran lote fue subastado, con un éxito indiscutible. Entre todos los relojes subastados, también destaca el Audemars Piguet Royal Oak Concept, el cronógrafo de cuerda automática que se vendió por $ 312,500. Y, curiosamente, el Patek Philippe de 1905, regalado al cirujano general que guió a los Estados Unidos a través de una pandemia hace un siglo, se vendió el pasado martes por $ 50,000.
