“Nuestra experiencia en marketing digital y el boom de Instagram fueron clave en el éxito de Cluse”
¿Cómo nació Cluse?
Trabajábamos juntos en 2009, en un start up, concretamente en tres e-commerces diferentes en las que también se vendían relojes. Vimos qué tipos de relojes se estaban vendiendo mejor, y qué diseños funcionaban. Fue entonces cuando nos dimos cuenta que era esencial un equilibrio entre el precio del producto y su diseño, por lo que vimos lógico dar un paso y crear nuestra propia marca. Empezamos por una marca masculina, ya que todo lo que vendíamos en ese momento era para hombres, y más adelante continuamos con una marca para mujeres, por que nos dimos cuenta que por aquel entonces, 2012-2013, las marcas relojeras femeninas no se aliaban con la moda; faltaba algo en los diseños que ofrecían y el precio tampoco era el adecuado, pagabas demasiado por un producto que no era para tanto. De esta manera, encontramos el momento perfecto para diseñar relojes minimalistas, a un precio asequible y buscando qué tipo de productos podíamos crear bajo estos costes, dimos con la clave.
Gracias a influencers y diferentes concept stores, sobre todo de Amsterdam, que se sintieron atraídas por nuestra marca, vimos la oportunidad de hacerla crecer. Las variedades de diseño de nuestra primera colección tanto en cajas como en correas, con diferentes colores y texturas, fueron otro punto fuerte en nuestros inicios, ya que el poder intercambiar correas o poder encontrar un reloj para cada estilo es muy importante para el consumidor millennial.
¿Sois relojeros o venís de familia especializada en el sector o simple- mente visteis una oportunidad de mercado?
No somos relojeros de profesión pero si entras en nuestras casas verás muchos relojes, los coleccionamos desde hace años y este sector siempre nos llamó la atención. Cluse no fue una coincidencia, siempre nos hemos sentido atraídos por los relojes. Así es que en 2013 nació Cluse, en 2014 empezamos a vender online y en 2015 dimos el paso en Instagram y empezaron nuestras colaboraciones con las influencers.
¿Cuál fue la fórmula que os llevó al éxito?
El marketing digital ya estaba en nuestro ADN, ya teníamos experiencia en el e-commerce y en la venta de relojes; la combinación de esta experiencia junto con el boom de Instagram fueron clave para nuestro éxito. Instagram crecía cada vez más rápido y nosotros decidimos empezar a colaborar con influencers que en aquel momento no eran tan conocidos como ahora; fuimos la primera marca en trabajar con ellos y eso también forma parte de la fórmula de éxito.
¿Cómo ha sido vuestra experiencia con el boom de los influencers?
Cuando empezamos a trabajar con ellas era algo nuevo y la gente reaccionó muy bien; empezamos a trabajar con las más fuertes de Alemania, Francia y España, con Dulceida, y aún trabajamos con ellas. También hemos notado que hay muchos influencers que no son reales y que tienen seguidores falsos porque los compran, por lo que a veces resulta difícil trabajar este tema. Pero en definitiva, nos ayudan mucho a conectar entre la marca y el cliente.
Y ahora que el mundo de las influencers ya no es lo que era, es decir, ya no generan tantas conversiones como antes, ¿qué estrategia tenéis de cara al futuro?
Cuando haces algo nuevo la gente reacciona de una manera muy fuerte y en aquel momento era así. Una influencer es muy comercial, pero si es cierto que nos hemos dado cuenta de esto y ahora queremos apostar por otras vías, como publicidad en televisión en Francia y Alemania, o la prensa tradicional.
¿Cómo controláis por un lado las ventas offline y, por otro, las ventas en el mundo online?
Tenemos dos equipos, uno se encarga del e-commerce y otro del offline. En muchos casos lo llevamos directamente nosotros, aunque también contamos con distribuidores. Tenemos una relación directa con el cliente y a veces tenemos la sensación de que hemos creado dos mercados diferentes, si vendes directamente al consumidor es muy fácil llegar al mercado, pero si quieres que los retailers estén satisfechos, tienes que respetar sus calendarios, no puedes sorprenderles todo el tiempo con nuevas colecciones porque no están preparados para ello y es posible que hayan utilizado sus presupuestos; es algo a lo que nos tenemos que adaptar.
¿Me podéis decir la facturación online en España?
Ahora mismo no lo sé, pero te puedo decir que España es nuestro quinto mercado más potente y que nuestra facturación total en el último año fue de 60/70 millones de euros.
¿Tenéis planes de abrir una flagship o tienda propia en España?
Depende del resto de planes que podamos acordar con los distribuidores que tenemos en España; City Time tiene mucha experiencia en esto, pero tenemos que mirarlo, ya que nos gusta ir paso a paso.