“Quiero transmitir que la joyería no es algo inaccesible”
Nace D’lujo, fresco negocio online en el que diseño, marketing y comercialización corren a cargo de Isabel Peña, que a su vez dirige y supervisa la producción realizada por su familia. Tiene tan solo 27 años y se ha formado en ADE, Marketing y Comunicación. En sus raíces, una dilatada herencia joyera, ya que representa la cuarta generación de la familia Peña, propietarios de una de las fábricas con más tradición de nuestro país. Una joven que se ha asomado al sector que la vio nacer con nuevos ojos. Y una familia que ha entendido que quisiera pilotar su propia aventura.
¿Cuándo y porqué nace D’lujo?
Ya desde pequeña, cuando acompañaba a mi padre a la fábrica, me encantaba sumergirme en el proceso de creatividad. Siempre me gustó el diseño y soñaba con hacer mis propias colecciones, pero mis padres me pusieron como condición estudiar y terminar la carrera antes de cumplir con este sueño. Así fue. Tras acabar los estudios y tras año y medio trabajando en el proyecto, intentando aprender, equivocándome… D’lujo vio la luz en octubre como un proyecto diferente con personalidad propia, emancipado del negocio familiar.
¿Y con qué filosofía?
Lo que quiero transmitir es que la joyería no es algo inaccesible, ni para cualquier chica de mi edad ni para aquellas mujeres que no se pueden permitir una pieza cara. Con D’lujo pretendemos dar la ortunidad a todo el mundo de lucir joyería de calidad a un precio asequible. Incluso diseños voluminosos que por el precio del oro estarían vetados. Por eso decidí hacer toda mi producción en plata, lo que permite una creatividad solo condicionada por el gusto, no por el peso ni el coste del material.
¿Cuántas colecciones tienen?
Mi objetivo son cuatro al año. La primera en lanzar en octubre fue una colección básica, o sea, piezas finitas, criollas… Pero mi reto es compaginarlo con colecciones de alta creatividad. Es totalmente compatible lucir ambos tipos de piezas, una pulsera clásica, como una riviere, con una pieza más elaborada. De ahí la colección de fiesta o la de Navidad.
¿Qué materiales usa?
Plata rodiada y bañada en oro de 18 kt y piedras naturales. El acabado de las piezas es de alta joyería. Tanto baño de rodio para la plata blanca como el vermeil para las colecciones más altas acabadas en oro amarillo u oro rosa de 18 kt. O sea, chapado de 3 micras de oro depositadas directamente sobre la plata, con lo cual aseguramos durabilidad y calidad.
La pregunta del millón. ¿De qué forma se ha posicionado en Internet en solo tres meses?
Todo lo he hecho paso a paso. Empecé por la web, que la hice yo desde el principio, pero en la carrera te enseñan lo básico. Me equivoqué mil veces, hay que hacer mil cosas; cursos de posicionamiento SEO, etiquetar las fotos, una locura. En cuanto al target, me orienté en uno verdaderamente amplio, desde una chica joven que compra su primera joya hasta las madres que siguen tendencias y quieren renovar su joyero.
¿Y cómo le han ido las ventas?
Multiplicamos por cuatro las expectativas, aunque se entienda lógico que fueran bajas cuando las hicimos. No sabíamos si iba a funcionar querer llegar a un público tan amplio y que nuestro producto gustara a todo el mundo. Todos me decían, esto es muy duro, tienes que ir despacio, no te deprimas…Y la verdad, estamos sorprendidos gratamente. Por ejemplo, en el Black Friday nos quedamos sin stocks y hubo que poner la fábrica a pleno rendimiento para cubrir las expectativas. Los primeros 30 minutos de ese viernes entraron más de 60 pedidos.
¿Y la campaña navideña?
Navidad, muy bien. Yo pensaba que iba a haber un momento que se cortasen las ventas, días claves como el 22 de diciembre o el 5 de enero, pero no. Incluso tuvimos pedidos hasta el día de Navidad, cuando estaba comiendo con la familia.
¿Y a qué lo atribuye?
Pensamos que probablemente fue el lanzamiento exclusivo de una colección, la Polar, con piezas de mayor volumen, específica para estas fechas. Sí, he tenido la certeza de que el consumidor no quiere en Navidad que le vendamos lo mismo, sino algo más afín al momento.
Tanto que se habla de que la joyería está en crisis… ¿Opina que, más que el producto, es la forma de venderlo y acercarse al consumidor?
Mire, al lanzar D’lujo yo quería estar detrás, no ser protagonista en la marca. Pero me di cuenta que a la gente le gusta escribir a mi perfil personal, pidiéndome opinión, orientaciones… La clienta quiere esa cercanía que ahora dan las redes sociales; conocer tu día a día, sentir que eres una chica normal como ella y confiar en ti. Hay clientas que han hecho hasta seis pedidos, y en solo tres meses.
¿Le resulta fácil tirar de tanto tan pronto?
Hay días que son las dos de la mañana y sigo contestando a la gente, pero yo me siento muy bien al hacerlo. Toda mi familia y amigos se han volcado al 100%, colaborando… Así que no me siento sola.
Creemos que le corteja ya el offline…
Eso son los inputs que recibo por las redes sociales. Me llegan correos explicándome: “Tengo una joyería y me encantaría tener tus productos”. Y también soy consciente de que hay mucha gente a la que le gusta ver y sentir físicamente una joya.
La implantación física de la marca, ¿bajo qué parámetros le gustaría?
El proyecto de este año es posicionar a D’lujo en joyería, pero de forma muy personal y exclusiva, no como venta pura y dura. No quiero perder la cercanía, que sea una colaboración con los establecimientos, que crean en el proyecto y lo mimen. Un acuerdo donde podamos vivir D’lujo con el mismo servicio y garantía.
¿Y showroom propio?
Lo haremos en Madrid muy pronto. Lógicamente un espacio donde se respire la misma filosofía que nuestra home online. Lo entiendo como una parte más de mi vida y de D’lujo.
Sabemos que hay famosas e influyentes a las que les encanta D’lujo. ¿Nos puede dar algunos nombres?
Contamos con influencers como Alice Campello, Cristina Pedroche, Malena Costa, Carmen Lomana, Ana Antic , Beatriz Espejel, Neus Bermejo, Michelle Calvó, Ruth Lorenzo… Les gustan las propuestas D’lujo.
Para mayor información: Tel.: 690 928 757
E-mail: press@dlujo.store Web: https://dlujo.store/