El On Screen se convirtió en la tendencia viral del año pasado, que sigue presente hoy en día. Pero, ¿cómo?.
On Screen es el fenómeno que surge en un momento complicado en el que la joyería ha visto como empezaba a colocarse en un primer plano. Y es que, consecuencia directa de la pandemia, son muchos los aprendizajes y situaciones por los que hemos pasado desde hace casi un año. Un año en el que nadie se podría imaginar que el fenómeno provocado por esta situación y que ya se ha hecho viral tenga mucho que ver con la joyería. Claro que, si lo miras desde otro lado, el anglosajón bautizado como On Screen es al mismo tiempo un guiño al valor emocional de nuestro sector.
“On Screen: used to refer to something or someone seen or appearing on a television or computer screen”. Dicho de otra manera, cómo expresar tu personalidad en tiempos de pandemia y teletrabajo. Las reuniones telemáticas dieron lugar a vestirnos de cintura para arriba, a no perder la comodidad de “estar por casa” y a la necesidad de sentirnos guapos a partes iguales; y las joyas se colocaron en un primer plano, se encargaron de vestirnos de cintura para arriba de una forma que la atención recayera totalmente en ellas. Aunque lo mejor llegó después, cuando este gesto se hizo viral y las generaciones más jóvenes se empezaron a entusiasmar por piezas exclusivas y originales; incluso ese target que no le prestaba tanta atención a los detalles acabo cayendo en la tentación. Y si hablamos de las últimas pasarelas de moda, podemos ser testigos de colecciones en las que las partes de arriba nacen bajo diseños especiales mientras las partes de abajo abogan por la comodidad y, estos conjuntos, se complementan con maxi piezas.
Al inicio de esta nueva tendencia, los expertos afirmaban que los complementos que quedan fuera de la pantalla perderían importancia. Y así fue como el On Screen se convirtió en la tendencia viral del año pasado, que sigue presente hoy en día. Pero, ¿cómo?
Zara y Netflix
Toda esta situación ha influido en nuestra forma de ser, en nuestra forma de vestirnos y, por supuesto, en nuestra forma de consumir. Este sector está hoy en boca de todos y en el punto de mira de todos los públicos. Desde las colecciones de Zara, que aunque para algunos pueda parecer competencia, para otros es revalorizar estos complementos en un momento en el que el “new comfy” también es tendencia; pasando por Netflix, que también ha creado su propio fenómeno, “screen style”, generando que los usuarios se lancen a buscar moda relacionada con algunas de sus últimas series, en las que la joyería y relojería también están presentes. De hecho, a la hora de crear los vestuarios, Netflix se interesa cada vez más por este sector.
Es como cuando abres Instagram para ver que están llevando las celebrities internacionales, o cuando navegas por Pinterest para llenarte de inspiración. El On Screen es el nuevo escaparate, lo que genera un nuevo deseo en adquirir aquellos artículos que luzcan a través de una pantalla y que hablen de nosotros. Al mismo tiempo, si pensamos en como será el mundo posterior al COVID-19 y tenemos en cuenta que los consumidores ya no piensan en un vestido nuevo para salir el viernes o un viaje para el fin de semana, la calidad frente a la cantidad ganará la batalla y si, según un estudio, en China, los productos que provocan alegría están en demanda, aquí también puede ocurrir lo mismo. Es decir, después de casi un año donde comprar solo artículos esenciales era la tendencia por excelencia, los caprichos pueden pasar por aquellos artículos que transmitan sentimientos, emociones, alegría y que también se puedan lucir en cualquier momento, como en una reunión vía Zoom.
Una tendencia acelerada
La pandemia y el confinamiento nos enseñaron a encontrarnos con nosotros mismos y el teletrabajo nos brindó una nueva relación con la moda y sus complementos. Aprendimos a vestirnos para nosotros mismos, a sacar lo mejor de nosotros y a transmitir nuestra personalidad y nuestros gustos al mundo a través de una pequeña pantalla, la que nos permitía sentirnos cerca de los demás. Y, en esa misma pantalla, decidimos mostrar todo aquello que nos identifica. Las joyas fueron, sin duda, las grandes protagonistas. Cuanto más maxi, mejor; cuanto más originales, mejor. Aunque esta nueva forma de entender la moda y de superponer artículos elegantes con otros más cómodos también ha llevado a generar un deseo entre piezas más clásicas y atemporales, apreciando aún más el valor que hay detrás de todo el trabajo de este sector; joyas que siempre tienen lugar en el joyero.
Y con ello, también aprendimos el valor sentimental y emocional de una joya, lo que la envuelve y la hace formar parte de nosotros. Quizás este nuevo fenómeno pueda parecer una tendencia más, pero lo cierto es que la crisis sanitaria solo ha acelerado lo que prometía llegar de un momento a otro; sentirnos cómodos con nosotros mismos, darle un giro al término “working girl”, optando por prendas en las que sentirnos bien sin perder la elegancia y haciendo uso de una joyería que eleva cualquier estilismo.
A lo largo del año pasado, desde Grupo Duplex hemos podido estar en contacto con diferentes profesionales del sector y, muchos de ellos confirmaban que en ciertas temporadas del año pasado habían conseguido cumplir, o incluso duplicar, sus expectativas de venta. Y es aquí donde todo esto cobra sentido.
Y cuando todo esto pase, cuando esta situación acabe y volvamos a la verdadera normalidad, podremos echar la vista atrás y ser conscientes de cuántos nuevos hábitos han llegado para quedarse; entre ellos lo que este fenómeno realmente quiere transmitir. Quizás el teletrabajo sea temporal, o quizás muchas empresas lo acaben viendo como algo normal, pero es muy probable que la tendencia de verse cómodo y elegante al mismo tiempo, el usar complementos que nos hagan sentir mejor, y el vestirnos para nosotros mismos y no para los demás haya llegado para quedarse.