Aunque en bajos niveles, los diamantes cultivados en laboratorio son los últimos afectados por esta crisis. Con la joyería de oro podría ocurrir lo mismo.
La crisis energética de China es la última preocupación de muchos. Y la respuesta es sí; afecta a los diamantes pero concretamente a los diamantes cultivados en el laboratorio. Este sector, tal y como afirma el medio de comunicación El Economista, es el último en verse afectado por esta crisis que puede llevar, entre otras cosas, a que productos con este tipo de diamantes sean mucho más caros que hasta ahora.
Según Liu Houxiang, consultor del Centro Nacional de Pruebas de Piedras Preciosas, en una entrevista con la agencia Bloomberg, «la producción de gemas de alta calidad para joyería se ha reducido entre un 10% y un 15% durante el último mes«. Y es que, cada año se producen aproximadamente 7 millones de quilates de diamantes sintéticos, de los cuales 3 millones provienen de China.
Una crisis que también afecta a los diamantes cultivados en laboratorio aunque puede ser que el impacto no sea demasiado significativo hasta ahora. En caso de lo contrario, los precios podrían ser más elevados.
Si hablamos de la joyería de oro, según World Gold Council, las perspectivas de todo el año para la demanda de joyas en China son positivas, pero no exentas de desafíos. La demanda ya supera el año completo de 2020 y el cuarto trimestre tuvo un fuerte comienzo con ventas sólidas durante las vacaciones del Día Nacional. Pero persisten los riesgos. El crecimiento económico de China se enfrenta a desafíos y si continúan las recientes medidas de racionamiento de energía, esto probablemente crearía problemas en la fabricación. «En vista de esto, seguimos siendo cautelosamente optimistas sobre la demanda de joyas de oro de China en los próximos meses«.
En definitiva, la crisis energética está afectando al sector de los diamantes cultivados, aunque en bajos niveles, y puede que en un futuro pueda afectar a la joyería de oro, pero está claro que todavía es pronto para confirmarlo.
